UCR fija perfil opositor pero contiene a rebeldes

Roberto Iglesias

La Unión Cívica Radical ratificará hoy su rol opositor ante la concertación que cinco gobernadores del partido impulsan con el kirchnerismo. Pero, además, la cúpula oficial del radicalismo buscará contener a los mandatarios provinciales reconociendo la situación de asfixia a la que son sometidos por el gobierno nacional.

El Comité Federal se reunirá desde las 12 del mediodía y emitirá un pronunciamiento informal, ya que no es un órgano resolutivo del partido, donde reivindicarán el carácter opositor del radicalismo pero admitirán la posibilidad de discutir, en caso de ser necesario, junto al oficialismo, temas vinculados a políticas de Estado como una Ley de Coparticipación Federal o una reforma tributaria que mejore la distribución del ingreso. No habrá ninguna referencia a la candidatura de Roberto Lavagna.

Sin embargo, el encuentro que tendrá lugar en la sede de la calle Alsina 1786 apuntará también a realizar un conteo extraoficial de las adhesiones que la candidatura del ex ministro de Economía de Eduardo Duhalde y Néstor Kirchner reporta en los 24 comités de distrito de la UCR. El diputado mendocino Roberto Iglesias, jefe del radicalismo en todo el país, sabe que ésta será la última cumbre partidaria del año antes de la celebración de la Convención Nacional en agosto. Allí, se definirán formalmente las políticas de candidaturas y de alianzas para las elecciones presidenciales de 2007.

Apoyo

Un primer relevamiento de las posturas de los comités arroja que al menos 18 distritos apoyan el proyecto « Lavagna 2007», impulsado por el alfonsinismo y los titulares de los bloques de diputados (el rionegrino Fernando Chironi) y senadores (el mendocino Ernesto Sanz) en sintonía con sectores ex duhaldistas liderados por Jorge Sarghini y Eduardo Camaño.

Aunque la cúpula del partido sabe que la candidatura de Lavagna no es la mejor señal para destacar el perfil opositor de la UCR, son conscientes de que esta jugada electoral es, quizás, la última oportunidad de revivir al radicalismo y de evitar la desaparición de su representatividad en los parlamentos de todo el país.

Por eso buscarán contener a los gobernadores -alineados con la Casa Rosada- Julio Cobos (Mendoza), Gerardo Zamora (Santiago del Estero), Arturo Colombi (Corrientes), Eduardo Brizuela del Moral ( Catamarca) y Miguel Saiz (Río Negro), quienes anunciaron que no estarán hoy en Buenos Aires.

Por eso Iglesias incluyó en el temario de la reunión un análisis de la situación nacional política y partidaria, la reforma a la Ley Federal de Educación, al sistema previsional y una Ley de Coparticipación Federal.

Todos temas que podrían ayudar a satisfacer la « necesidades» de los mandatarios del interior, sobre la base de las cuales justifican su acercamiento a las huestes del oficialismo. Junto a los gobernadores se encuentra una veintena de intendentes como Horacio Quiroga (Neuquén), Gustavo Posse (San Isidro), Enrique García (Vicente López) y Daniel Katz (Mar del Plata).

La tercera vía dentro de la UCR -es decir, ni lavagnismo ni kirchnerismo- la encarna Margarita Stolbizer, secretaria general de la UCR. «Es un gran error poner como candidato a presidente al ministro estrella de este gobierno, ya que lo que tanto se le critica al Presidente también lo fomentó Lavagna», reflexionó ayer la ex diputada, más cercana a un acuerdo con el Partido Socialista de Rubén Giustiniani y con el ARI de Elisa Carrió. «Se está cometiendo el mismo error con la Alianza del 99, que sólo sirvió para ganar las elecciones pero no había un sustento de proyecto para gobernar al país», concluyó la blonda dirigente bonaerense.

Enfrentada con la posición de los gobernadores radicales kirchneristas, la Juventud Radical (JR) emitió ayer un duro comunicado en respuesta a las declaraciones del santiagueño Zamora, quien en tono autodestructivo había afirmado que «la UCR como alternativa no existe». La JR contraatacó por escrito: «Nos sorprende, Zamora, se olvida que hace un poco más de un año, Kirchner repartió desmedidamente ayuda social para derrotarlo. Pero desde el radicalismo, más de mil militantes de todo el país lo acompañamos para derrotar definitivamente el caudillismo de Santiago del Estero. Zamora debería sincerarse, que deje de ser ambiguo y que admita que dejó de lado sus convicciones por la billetera de Kirchner». En relación con Zamora, algunos memoriosos radicales recordaban ayer a última hora a Hipólito Yrigoyen cuando casi un siglo atrás hablaba de las «patéticas miserabilidades y de sus efectividades conducentes». Y se preguntaban: «¿Se habrá imaginado Don Hipólito a un santiagueño en Madrid cuando pronunció esta frase?».