Charlas de quincho

Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires

Apenas a cuatro semanas de las elecciones, se recalienta el clima político. Coloquio (de IDEA) con sorpresas. Comenzaron los debates. Se complican más los mapuches en la región. Controles de precio vs. la alegría del fútbol. Buenos Aires colapsada por movimientos sociales. Manzur y Guzmán negociaron en EE.UU. Día de la Lealtad con idas y vueltas. Llega Macri. Vuelve covid, ahora por tercera dosis. Veamos.

Relax

Sólo el clima óptimo de sábado y domingo permitió relajar las tensiones de una semana casi infinita, a la luz de la cantidad de sucesos que se fueron produciendo. Lo más saliente, sin embargo, fue el 57º Coloquio de Idea, esta vez en Costa Salguero, que se constituyó en el epicentro de rumores, trascendidos, y caja de resonancia por 3 días, especialmente del mundo empresarial y político.

La novedad más fuerte, sin duda, fue el mensaje grabado del papa Francisco con un texto algo ambiguo, y bastante distinto al habitual, y que muchos quisieron interpretar como de “acercamiento” a la realidad de las empresas locales, haciendo hincapié en “la dignidad del trabajo” (…) “que da alas”; el Sumo Pontífice expresó que “siendo esto así, queda claro que los subsidios sólo pueden ser una ayuda provisoria. No se puede vivir de subsidios”.

El segundo hecho saliente estuvo en el cierre a cargo de Alberto Fernández, tal vez algo menos conciliador con los empresarios, inmersos en una fuerte pulseada con el nuevo secretario de Comercio, Roberto Feletti, la propuesta de congelamiento de precios al consumo de unos 1.300 productos por unos 90 días, y la amenaza de aplicar la Ley de Abastecimiento. Tras hacerse esperar algo más de una hora, Alberto Fernández aseguró que “nadie es feliz con los subsidios”, y que “no queda más remedio que la inversión privada para lograr un desarrollo sostenible”. Para los hombres de negocios, el saldo fue decepcionante.

“Qué nos vienen a amenazar con la Ley de Abastecimiento, y con congelar los precios, si hace casi dos años que ya estamos con precios acordados, administrados, sugeridos, etc.”, se enojaba el CEO de una fuerte alimentaria. Un poco más moderado durante el fin de semana, Feletti aceptó, indirectamente, que el tema no está cerrado (lo que podría ocurrir hoy, con las propuestas que lleven los empresarios), y que “preferiría llegar a un acuerdo por consenso”. Menor fue el impacto de la reaparición de Débora Giorgi, figura también de varias administraciones anteriores, y que no cuenta con el mejor ascendiente sobre el sector privado.

Segundas marcas

Mientras, en las principales mesas de los quinchos se comentaba también esto y las derivaciones que habitualmente suelen tener las medidas más rígidas de control que van desde la “desaparición” de productos, la irrupción de segundas marcas, los envases de menor contenido, en muchos casos la pérdida de calidad para abaratar costos, hasta la venta en negro, según se constató en la cantidad de casos en que se aplicaron estas herramientas. Algunos, incluso, indicaban que eso ya se está viendo desde hace meses, y por distintas causas que incluyen las restricciones a la importación, como la falta de insumos como materiales para el vidrio de envases, caucho para cubiertas, etc., que están determinando faltantes de distinta magnitud.

Para otros, el asunto pasa por la inflación, que en septiembre sumó 3,5%, totalizando 37% en lo que va del año, y que con porcentajes mucho más lógicos también se está dando en todo el mundo debido a la fuerte inyección de dinero que se hizo para poder afrontar los muy altos costos de la pandemia, que recién ahora comienza a aflojar (parcialmente).

Guerra

A pesar de los muy buenos resultados en las PASO de Juntos por el Cambio, el principal interbloque opositor enfrenta por estas horas una muy fuerte disputa iniciada desde la Ciudad de Buenos Aires y vía PRO. Todo, por el poco conocimiento de las realidades en las provincias, insólitos maltratos a los candidatos y aires de futuro ministro del Interior del actual secretario de Ambiente Porteño y delegado de Horacio Rodríguez Larreta para la campaña fuera del AMBA, Eduardo Macchiavelli.

El funcionario, que se vende en reuniones como el verdadero “armador federal” del macrismo, hastió a los postulantes que pelean casi en soledad desde hace varios años en sus distritos y ahora reciben problemas en vez de apoyo. El pensamiento es casi unánime y ya fue trasladado al propio jefe de Gobierno de la Capital Federal. “Macchiavelli está acostumbrado a la lógica porteña donde los legisladores son empleados. Después nos abandonan y peleamos en Vietnam con un tenedor”, deslizaron a Ámbito

A los reclamos se les suma el manejo “discrecional” y “sin criterio objetivo” de los fondos de campaña, viajes en avión privado y solicitudes pasadas de tono para armarle agenda en provincias amigas e incluso enemigas. De hecho, Macchiavelli pidió ver a gobernadores kirchneristas y cristinistas en detrimento de sus propios candidatos para comenzar a armar enlaces de “consenso” a favor de Rodríguez Larreta. “¿Nos quieren limar el piso en medio de la campaña porque piensan en la presidencial 2023?”, se preguntan algunos.

China

En las pobladas mesas de bares de buena parte del país, otros comentarios incluían la fuerte crisis energética que se está produciendo en China (entre otras causas, porque dejó de importar carbón a Australia, país al que sancionó comercialmente), y que constituye también una de las causas del sostenido precio mundial del petróleo por arriba de los u$s80 el barril. Y esto, junto al fuerte crecimiento de la demanda mundial de fletes disparó estos precios en forma incremental, lo que impacta en los valores finales de las mercaderías.

En el caso de Argentina, el tema se agrava por la caída de las importaciones que determina menor afluencia de buques, y por ende, de disponibilidad de fletes para exportar, según comentaba un grupito sentado en una amplia vereda sombreada, alarmados aún por el nuevo caso de lavado descubierto en Rosario, relacionado con la pasada administración del Puerto de esa ciudad, y que entre otros, incluiría al hijo del dirigente español Jordi Pujol. Los hombres de negocios recordaban también que ya a principios de semana se había producido un almuerzo de acercamiento con el Gobierno, organizado por el titular de la Cámara de Diputados, Sergio Massa, aunque luego todo esto quedó sepultado ante la sucesión de hechos posteriores. Aunque bastante menos mediático, el inesperado movimiento en el Mercosur, en el que en la primera salida del ahora canciller Santiago Cafiero a Brasil donde se reunió con su par, Carlos Alberto França en Brasilia, Argentina aceptó bajar el AEC (arancel externo común), aunque sólo 10% (Brasil pretendía un “piso” de 20%), tema que vienen reclamando fuertemente los socios más aperturistas de la región, descolocó a algunos, en especial de los sectores más sensibles, o protegidos.

De todos modos, rápido para los lobbies, quedaron exentos sectores sensibles, como el automotor, el textil y el de calzados; y aunque Jair Bolsonaro reclamaba una baja mucho mayor (planteó una baja inicial de 50%), los diplomáticos entendieron que el acuerdo sirvió para acercar a las partes y evitar una ruptura que en algunos momentos llegó a parecer inevitable. Algunos, incluso, lo consideraron un triunfo del embajador Daniel Scioli.

Nueva York

Sin embargo, las mesas más picantes fueron las de política con temas de todos los tipos y colores. Por supuesto que el jefe de Gabinete, Juan Manzur, y su viaje a EE.UU. fue de los primeros en ser abordados, especialmente porque algunos rumores que lo ubicaban respaldando al ministro de Economía, Martín Guzmán, en su gestión con inversores, en realidad, habría sido con mayoría de acreedores inquietos por saber que pasará según el resultado de las elecciones en noviembre.

Hubo inquietud y preguntas molestas en esa ronda que Manzur y Guzmán tuvieron en el Consulado General del país en Nueva York con banqueros y fondos de inversión, pero por ahora ninguna novedad concreta. Pero sin duda, decían en las mesas, uno de los más complicados es el también nuevo ministro de Seguridad, Aníbal Fernández, y no solo por la escalada pública de su entredicho con un humorista gráfico, sino también por el enrarecimiento del conflicto mapuche en la región y sus múltiples derivaciones, como la militarización de la región sur, dictaminada por el mandatario trasandino Sebastián Piñera, pero sobre la cual no hay mayor definición oficial del lado argentino, aunque si siguen las denuncias de los privados. Para colmo, decía un embajador local por ahora sin destino, la participación del embajador argentino, Rafael Bielsa, en el juicio a Facundo Jones Hualas que busca ser extraditado a la Argentina lo que, para colmo, fue denegado por el tribunal chileno, no ayuda demasiado en la ya compleja relación entre ambos países.

Para Aníbal Fernández, aparecen además los problemas con relacionados con un brote de inseguridad rural, y con violencia, con casos registrados hasta ahora en Santa Fe, Santiago del Estero, y Entre Ríos, que no le dan respiro. Otro tema “caliente” en las mesas políticas es la supuesta próxima renuncia del titular de Seguridad bonaerense, Sergio Berni, y su futuro político de concretarse pero, sin duda, las especulaciones sobre la llegada mañana al país del expresidente, Mauricio Macri, y su presentación el miércoles, ante el juez subrogante de Dolores, Martín Baba, por el caso de las escuchas a los familiares de los marinos del ARA San Juan, es el que más especulaciones disparó en estos días.

Caos porteño

El otro tema muy recurrente, se centró en las multitudinarias (y casi diarias) movilizaciones de organizaciones sociales que colapsan, en general, el centro de la Ciudad de Buenos Aires, pero que también alcanzan a otras zonas. Y, como si esto no alcanzara, tras muchas idas y vueltas, ayer finalmente se concretó la movilización para conmemorar el mítico 17 de Octubre al que, finalmente, el presidente Fernández (que ayer anunció que será padre de un varón) convocó, aunque hasta última hora no se sabía si iba a participar.

Siguiendo los usos y costumbres, cantidad de colectivos escolares se fueron apostando en distintas avenidas, incluyendo la 9 de Julio, aunque bastante más alejados de lo habitual, pues se ubicaron después de avenida Belgrano y hacia Constitución. Y, tal vez como pulseada, o no hoy se concretará (aunque sin show) el acto de la CGT, celosa custodia del legado justicialista. Argentina le gana a Uruguay y ahora, el jueves, ante Perú. Por fuera de esto, hubo dos cuestiones interesantes que se dieron, la primera en el seno del PRO-Cambiemos cuando la Ciudad de Buenos Aires determinó comenzar el período lectivo antes de fines de febrero, y concretar algo que es inédito: 192 días de clases, lo que obligará a los maestros a incorporarse a principios de ese mismo mes para los cursos de actualización.

La protesta vino del lado del intendente de General Pueyrredón, también PRO, Guillermo Montenegro quien, naturalmente, intenta defender los flujos turísticos tras la crisis que la pandemia le impuso a ese sector (entre otros). El segundo hecho, más pintoresco tal vez (y solo por calificarlo de alguna manera) se dio en la localidad santafesina de Carcarañá cuando el intendente local, Miguel Ángel Vázquez, quiso aprovechar el acto por los Veteranos de Malvinas, y frente al “compañero” Juan José Gómez Centurión (a quién el mismo había convocado), tomó el micrófono para homenajear a las Madres de Plaza de Mayo, lo que fue rechazado por los vecinos presentes que se manifestaron en contra, hasta que el intendente se tuvo que alejar, y terminaron el acto sin él. El video se hizo viral.

Debate

En medio de todo esto, solo el nuevo triunfo de Argentina frente a Perú, aunque un tanto famélico, trajo un poco de alegría a las mesas quincheras, especialmente masculinas, que ya a esa altura estaban totalmente abocadas a los debates, tras la expectativa que había generado el de la Ciudad, entre la exgobernadora María Eugenia Vidal (Cambiemos); el imprevisible Javier Milei (Avanza Libertad); el equilibrado Leandro Santoro (FdT), y Myriam Bregman del PT que se ocupó, especialmente, de desacomodar a Milei quien hasta ahí no había tenido tropiezos. Por supuesto que la presencia del propio jefe de Gobierno, Horacio Rodríguez Larreta en los estudios, no pasó para nada desapercibida, y cada “hinchada” hizo lo suyo entre un mar de asesores, periodistas, fotógrafos y vigilancia que casi fue excedida por los intentos de ingresos de algunos que no estaban en las listas.

Tal parece que fue el caso de Mariano Recalde quien, finalmente, tuvo que retirarse y no del mejor humor. Para los privados, especialmente preparados para los que debatían y sus principales asesores, bandejitas con sandwiches de Los Dos Escudos, de pan negro con queso, manteca y jamón crudo, o de pan blanco, queso y jamón cocido; agua mineral, y masas secas, además de un coqueto anotador y vaporizadores en forma de lapiceras con alcohol líquido. Todo previsto. Ahora, se espera que ocurra lo mismo con los candidatos de la Provincia de Buenos Aires.