- ámbito
- Secciones Especiales
Trabajos temporarios: una alternativa para que los jóvenes adquieran experiencia y ganen dinero
Area de servicios
En la Argentina hay varias agencias de viaje que ofrecen programas especiales de empleo temporario en el exterior. Los trabajos más comunes corresponden al área de servicios, fundamentalmente hotelería y turismo, habida cuenta de que estas industrias necesitan un fuerte refuerzo de personal durante la temporada invernal norteamericana. Esto se debe a que desde diciembre y hasta abril, los estudiantes de ese país, que son los que suelen desempeñarse en ese tipo de empleos, se encuentran en plena época de exámenes universitarios, lo que obliga a los empleadores a abrir sus puertas a estudiantes extranjeros.
Los interesados tienen que atravesar por una serie de entrevistas de selección, en las cuales se hace mucho hincapié en el dominio del idioma. Por lo general, se exige que la persona exhiba un nivel intermedio avanzado, que le permita desenvolverse bien en una situación laboral.
No es fácil determinar el perfil de los estudiantes que suelen aprovechar este tipo de programas de empleos temporarios en el exterior, ya que la heterogeneidad es una de sus características, pero, a grandes rasgos, los jóvenes viajantes provienen de carreras como Ciencias Económicas, Turismo, Hotelería, Comercio Internacional, Comunicación, Gastronomía, Diseño, etc.
Ahora bien, a la hora de elegir el tipo de trabajo se presentan dos opciones:
•Bajo relación de dependencia. En este caso, la ventaja es que la persona ahorra tiempo y puede empezar a generar ingresos de manera inmediata, ni bien se instala en el país de destino. Además, el trabajador sabe de antemano quién será su empleador y cuánto le van a pagar. Pero, al mismo tiempo, no tendrá mucha flexibilidad para moverse, afrontará mayores costos de tramitación y por último resignará gran cantidad de experiencias e independencia.
•Trabajo independiente. Por el contrario, esta alternativa le ofrece al estudiante una mayor libertad y flexibilidad para elegir a su empleador, al tiempo que no se verá en la obligación de afrontar costos de tramitación. Sin embargo, deberá dedicarle una mayor cantidad de tiempo a la búsqueda y planificación del trabajo. Y, a su vez, el cobro del sueldo quedará supeditado al tiempo que le lleve a la persona conseguir un empleo.
Gustos y necesidades
Los especialistas señalan que a su vez la selección del empleador toma mucho trabajo y se hace en base a los gustos, necesidades y habilidades de cada postulante. Asimismo, a la hora de completar los formularios se recomienda ser lo más detallado posible e incluir la mayor cantidad de opciones.
Las agencias de viaje que hacen de intermediarias entre el trabajador y las empresas son las encargadas de acercar los formularios a la mayor cantidad de firmas posible.
Por su parte, el trabajo independiente se recomienda a todos aquellos que tienen contactos en el país al cual viajarán. De todas maneras, las agencias de viajes que incluyen programas laborales en el extranjero para sus clientes también les brindan asesoramiento, mediante una base de datos de empleadores, información para la confección del curriculum vitae y consejos para desempeñarse en una entrevista laboral.
Dentro de los Estados Unidos, la oferta de trabajo temporal es muy variada y abarca desde empleos en centros de esquí, hoteles, casinos, spa hasta trabajos en negocios de ropa, restoranes, bares y, en menor medida, medios de comunicación. Los destinos de los viajes incluyen tanto la Costa Oeste, como la Este, aunque los argentinos suelen inclinarse mayoritariamente por California, ubicada en la primera región. Otro de los puntos de mayor afluencia argentina son las zonas montañosas ubicadas en la zona oeste norteamericana, que suele tener buena demanda de trabajadores extranjeros durante la temporada alta (entre 3% y 15% del personal es de otro país). Por ejemplo, en un resort de Aspen, trabaja un promedio de 250 empleados extranjeros sobre un total de 3.000; es decir casi 10% del total.
Por lo general, los resorts le recomiendan al empleado la cantidad de dinero que le conviene llevar como para poder solventar sus gastos antes de cobrar el primer sueldo. Este monto varía según el lugar que se elija, pero oscila entre los $ 200 -esta cifra suele ser recomendada por aquellas empresas que le ofrecen al trabajador alojamiento, pero como contrapartida también brindan un sueldo más bajo- y $ 1.200. Sin embargo, a la hora de evaluar las distintas ofertas que puedan surgir, el monto del sueldo no lo es todo; el joven también deberá evaluar los beneficios adicionales, como pueden ser los free pass para esquiar en las pistas, lecciones de esquí y snowboard gratis y alquiler de equipos gratuito o bien con importantes descuentos. En este tipo de ofertas suelen incluirse también importantes descuentos en las comidas y en caso de que el trabajo sea en hoteles o restoranes, la misma será directamente gratis.
Alojamiento
Otra de las consideraciones a tener en cuenta a la hora de elegir el trabajo es el alojamiento; en caso de que el empleador provea el mismo el estudiante obtendrá una considerable reducción en sus gastos, aunque, como ya quedó dicho, esto puede derivar en un sueldo menor. También hay empresas que no ofrecen hospedajes gratis, pero sí alojamiento a precios muy baratos ($ 250 o $ 500) por mes.
En caso de que el objetivo principal del viajero sea ganar dinero el puesto de mozo se presenta como uno de los más recomendables, ya que permite obtener ingresos de entre $ 700 u $ 800 por semana. En cambio, si la intención es realizar un viaje a pura adrenalina, trabajar como instructor de esquí parece ser la opción más recomendada.
Por lo general, los empleos más frecuentes son profesor de esquí; cajero; administrativo; ventas; alquiler de equipos; chofer; recepcionista; mantenimiento; lavandería; ayudante; lavacopas y mozo. De todas maneras, hay ocasiones en las cuales los puestos no son estáticos, es decir que el empleado atraviesa por distintos sectores de la empresa realizando diversas funciones.
En los Estados Unidos, el sueldo mínimo es de u$s 5,15 la hora, aunque la mayoría de los empleadores ofrece un promedio de u$s 6,50 y en algunos casos llega hasta u$s 10. En todo cálculo también hay que incluir los ingresos estimados que se pueden obtener mediante las horas extra, que en más de una ocasión ayudan a aumentar considerablemente los ahorros finales que obtiene el viajero.
Obviamente, los sueldos dependen de los puestos de trabajo; por ejemplo, aquellos en los cuales el empleado recibe propina (tips) ofrecen menos dinero, pero a la larga el trabajador percibe más. Por su parte, los trabajos especializados, que exigen conocimientos específicos o experiencia también suelen incluir un plus en el ingreso, pero es más significativo que real. Generalmente se paga un bono (plus) a los empleados que realicen tareas durante toda la temporada completa (por lo general dura 4 meses).
Carga horaria
La carga horaria semanal depende del trabajo en cuestión, pero por lo general se ubica entre las 30 y 40 horas. Y la gran mayoría cobra cada quince días, algunos por semana y en la minoría de los casos de manera mensual.
De esta manera, la amortización de los gastos del programa se concreta aproximadamente a partir de la quinta o sexta semana de trabajo. El resto es ganancia.
La mayor oferta es para trabajar en los Estados Unidos, aunque también hay otros destinos posibles como Inglaterra -que revió su política anterior, que aceptaba sólo a personas con pasaporte europeo-, Irlanda, Francia -hay un programa llamado Work & Travel, que acepta postulantes de hasta 35 años y cuya mayor oferta laboral proviene del área de servicios, como Hotelería y Turismo- y Canadá -fundamentalmente a Ontario, Alberta y British Columbia-.
Ahora bien, uno de los temas cruciales de los programas de empleo temporales en el exterior es el aspecto legal. En caso de que la persona obtenga un trabajo en los Estados Unidos recibirá el formulario IAP66, para solicitar personalmente la visa J1 ante el consulado norteamericano. Allí deberá presentar documentación que demuestre solvencia económica propia o bien del grupo familiar (tarjeta de crédito, título de propiedad, constancia de alumno universitario regular, recibo de sueldo, etc). Con esta visa el viajante podrá tramitar el Número de Seguro Social (Social Security Number), obligatorio para desempeñarse como empleado en los Estados Unidos. Pero estas visas contemplan una permanencia por un tiempo determinado, transcurrido el cual el empleado deberá emprender, sí o sí, la vuelta. Para evitar esto la persona debería conseguir una visa de trabajo (categoría H), algo realmente difícil, habida cuenta de que son muy costosas para el empleador. Además, antes de obtenerla la empresa deberá demostrar ante el Departamento de Inmigración que el puesto no puede ser cubierto por un norteamericano.
SOlo para ellas
Otro de los empleos muy comunes durante el verano es el de baby sitter, que queda exclusivamente a cargo de mujeres. Esta práctica surgió en el siglo XVIII, época en la cual los jóvenes distinguidos solían emprender largos viajes al extranjero para aprender idiomas mientras las mujeres se veían en la obligación de quedarse en sus casas. Para cambiar esta situación, un grupo de familias acordó un convenio de intercambio cultural por intermedio del cual pudieran beneficiarse sus hijas, al cual le dieron el nombre de Au Pair, que significa en par o igual.
La experiencia se diseminó por diversos países del mundo, como Inglaterra, Nueva Zelanda o Australia, aunque el sitio en el cual alcanzó mayor desarrollo fue los Estados Unidos.
Norteamérica suele ser el lugar más elegido entre las argentinas, debido a que se pagan buenos sueldos y a que se respetan las condiciones de trabajo. Las funciones de la baby sitter, considerada algo así como la hermana mayor de la familia, consisten en cuidar a los niños, administrar la agenda y ayudar a preparar la comida. El máximo de horas de trabajo es de 45 a la semana.
Por ejemplo, el programa The Language Experience está dirigido a mujeres con un mínimo de 200 horas de experiencia en el cuidado de niños -ya sea en trabajo formal o voluntario en guarderías infantiles, jardines de infantes, animación de fiestas, o colonias de verano-. Además, las postulantes tienen que tener un nivel de inglés intermedio o avanzado, es decir los suficientes conocimientos como para poder desenvolverse en una situación laboral. También se exige que las jóvenes tengan registro para conducir.
Por su parte, el «Au Pair Extraordinario» tiene las mismas características pero se destina a profesoras de jardín de infantes o de educación inicial, con experiencia y una formación más profesional, de manera que los salarios también son más elevados.
Una buena fuente de información para conocer la oferta de empleos de este tipo es Internet. Por caso, la página web de la International Au Pair Association (hhttp://IAPA.ORG), fundada en 1994 e integrada por 38 países y 112 agencias.
En Europa el au-pair es un acuerdo internacional que permite vivir en un país extranjero aprendiendo el idioma y conviviendo con una familia nativa como si la persona fuera un miembro más de ella. En estos casos, la ayuda prestada debe llegar a las 30 horas semanales. A diferencia con los Estados Unidos, en donde los programas son anuales, la duración de un au-pair en Europa es de 6, 9 o 12 meses. Y la edad límite varía según cada país; en Francia, al igual que los Estados Unidos es de 25 años, mientras que en Alemania e Italia es de 27.
De todas maneras, vale aclarar que si la persona no cuenta con el pasaporte de la Unión Europea solamente podrá trabajar en siete países: Francia, Italia, Alemania, Austria, Bélgica, Holanda y Dinamarca.
Al aire libre
El empleo en un camp o colonia de verano es otra de las alternativas viables. Esta modalidad es para quienes disfruten trabajando con chicos y el contacto con la naturaleza. También hay que destacar que el trabajo en las colonias es muy exigente; comienza bien temprano por la mañana y se prolonga durante todo el día, con las más diversas actividades.
Hay colonias de verano para todos los gustos y creencias: religiosas, de scouts, para personas con necesidades especiales, etc. En la elección de los perfiles se toma en cuenta la experiencia del trabajo con chicos; por lo que los docentes -en particular maestras jardineras y profesores de educación física- son los preferidos. Pero la convocatoria está abierta a todos los extranjeros con conocimientos en determinadas actividades, como artesanías, diseño y producción de videos, buceo, guardavidas, natación, windsurf, ciencias naturales, supervivencia, mountain bike, camping, magia, coreografía, dirección artística, cocina, computación, contaduría, enfermería, etc.
En los Estados Unidos, los summer camps son una tradición muy arraigada, de la cual participan 5 millones de niños y adolescentes por año.
A través de los representantes locales se puede obtener información, mediante charlas con gente que ya asistió a los lugares, videos, conferencias, etc.
De más está decir que la persona que se postule para uno de estos trabajos debe reunir las condiciones de todo instructor que se precie de tal, como ser: disfrutar el trabajo con los chicos; no tener problemas para convivir con mucha gente; carácter flexible y alegre; gusto por la pedagogía; disfrutar del aire libre, los deportes y los campamentos.
Queda claro que el verano ofrece múltiples oportunidades para los jóvenes que quieran aprovechar sus vacaciones para trabajar, ahorrar dinero, divertirse, conocer nueva gente y nuevos lugares y vivir experiencias inolvidables.
Fuente: «Trabajos para Jóvenes»; Ediciones Becas & Empleos.
Dejá tu comentario