Habló Binner y estalló interna en el partido

Santa Fe - El socialismo santafesino dejó ver este fin de semana las grietas políticas que le impedirán llegar al 24 de julio de 2011 sin atravesar la instancia de las internas. El estallido lo provocó el propio gobernador Hermes Binner, que cargó duro contra el titular del Partido Socialista y candidato a sucederlo, Rubén Giustiniani.

El mandatario lo criticó por mantenerse en la pelea por la gobernación y recalcó que si el legislador decide postularse, su candidatura legislativa de 2009 terminará siendo testimonial. «Yo hice campaña para que sea senador y no vino a ninguna inauguración de obras», lanzó Binner, un ex adversario del titular del socialismo nacional.

Además, el titular del Ejecutivo respaldó la candidatura de su ministro de Gobierno, Antonio Bonfatti, y recalcó que esa decisión no es un capricho, ya que en caso de que Giustiniani decline su banca en el Senado, ésta será ocupada por la radical María Silvia Migno.

Por el senador salió a responder el diputado provincial Eduardo Di Pollina, titular de la Cámara de Diputados y hombre de confianza de Giustiniani. «Es el mismo caso que Binner, cuando dejó su puesto de concejal para asumir la intendencia de Rosario», disparó.

En idéntico sentido salió en defensa otro referente de ese sector, Miguel Zamarini, presidente del Concejo Municipal de Rosario: «No son correctas esas afirmaciones. El propio Binner, en 1995, no finalizó su mandato como concejal para asumir la intendencia y en 2007 tampoco terminó su ciclo como diputado para hacerse cargo de la gobernación», dijo.

«Y hasta hubo otros que ganaron elecciones y ni siquiera asumieron sus cargos», completó en alusión al propio Bonfatti, quien encabezó en 1995 la lista de concejales del socialismo que se impuso ampliamente en los comicios pero que en vez de asumir la banca se incorporó como secretario de Gobierno de la administración de Binner.

El funcionario es, por definición, el candidato natural del gobernador, quien a su vez se encamina a convertirse en el compañero de la fórmula presidencial que encabeza el diputado Ricardo Alfonsín como parte del acuerdo del Frente Progresista Cívico y Social.

Giustiniani, por su parte, está convencido de que tiene resto suficiente para acceder a la candidatura a gobernador, siempre y cuando los socialistas logren después superar el otro frente de batalla que se les abre con los radicales que intentan imponer como cabeza de fórmula a la gobernación al intendente de Santa Fe, Mario Barletta.

En el medio asoman también las pretensiones del intendente de Rosario, Miguel Lifschitz, lanzado a la carrera para suceder a Binner.

Incluso ya hay sectores dentro del propio partido que impulsan al intendente como el candidato de consenso. Lifschitz hoy por hoy aparece como el mejor posicionado en las encuestas de intención de voto junto con el precandidato del PJ, el diputado Agustín Rossi (ver reportaje en esta misma edición).