Los precios del petróleo reanudaron su ascenso en Nueva York y Londres ante temores sobre el aprovisionamiento suscitados por la tensión entre Israel e Irán, segundo productor de la Organización de Países Exportadores de Petróleo.
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El barril de West Texas Intermediate (designación del "light sweet crude" negociado en EEUU) para entrega en agosto cerró en 140,97 dólares, un récord de cierre, en alza de 97 centavos en relación al lunes en el New York Mercantile Exchange (Nymex).
En Londres, el barril de Brent del mar del Norte para entrega en agosto también alcanzó un nuevo techo de cierre, a 140,67 dólares (+84 centavos).
El movimiento al alza estuvo facilitado por el anuncio de que la Agencia Internacional de la Energía (AIE) había revisado a la baja sus previsiones de la producción mundial hasta 2013. La agencia, que defiende los intereses de los países industrializados, prevé por el contrario que la demanda se mantenga firme, principalmente en los países emergentes.
En la primera sesión de julio, la cotización del oro negro superó los 143 dólares, llegando a pocos centavos de su récord absoluto (143,67 dólares el barril), alcanzado el lunes.
"Toda perturbación de los aprovisionamientos alimenta la disparada de los precios, como podría ser el caso del Golfo", resumió Mike Fitzpatrick, analista de la casa de corretajes MF Global.
Los envíos de crudo podrían ser interrumpidos en Medio Oriente a causa de la tensión entre Israel y Estados Unidos por un lado e Irán por el otro, en relación al programa nuclear de Teherán, subrayan analistas.
Los mercados están cada vez más convencidos de que Israel considera una ofensiva contra Irán. Irán amenazó con que en caso de ataque contra su territorio, instalaría controles en el estrecho de Ormuz, por donde transita un 40% de las exportaciones mundiales de crudo.
En lo que se refiere a la oferta, la AIE prevé que ésta aumentará más lentamente que lo previsto hasta 2013, dejando poca capacidad ociosa al mercado, pese a una leve desaceleración del incremento de la demanda.
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