Terminado el primer semestre, la pregunta del mercado es cómo puede llegar a fin de año el Gobierno con los números fiscales en orden. La segunda mitad del año presenta mayores desafíos porque estacionalmente hay una mayor ejecución de partidas, combinada con una caída de recaudación proveniente del comercio exterior.
En el segundo semestre, Luis Caputo podrá ajustar menos y tener superávit igual: las razones
Dada la extraordinaria acumulación de superávit en el primer semestre del año, ahora el Gobierno tiene margen para enfrentar el segundo tramo de 2024 gastando un poco más, sin poner en peligro el resultado fiscal.
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Aún así, el Gobierno tiene varios ases bajo la manga para encarar el final de año. Para algunos analistas, podría subir el gasto entre 10 y 15 puntos sin que por ello peligre el “ancla fiscal”. Otros advierten que Luis Caputo tiene que mantener una brecha entre evolución del gasto e ingresos de 17 puntos.
Este jueves, entonces, se empezará a conocer cómo empezó a transitar la segunda parte de 2024 el ministro de Economía. El gobierno dará a conocer el resultado de la recaudación fiscal de julio que mantendría la dinámica de junio. El mes pasado los ingresos de la AFIP mostraron una baja del 14%. El efecto del paquete fiscal no se va a producir hasta agosto. Se trata de una de las patas del ancla fiscal. La otra es el gasto.
El mercado aprobó la "motosierra"
Según indicó el economista y jefe de investigaciones de Cohen Argentina, Martín Polo, en una charla con inversores, el mejor activo que tiene el Gobierno para mostrar al mercado, hasta ahora, es el compromiso con el ancla fiscal.
“Si mantiene esta disciplina hasta fin de año -obvio que va a ser más desafiante porque creemos que el ajuste del gasto va a ser menor- en un contexto en el que va a recaudar más por Impuesto a las Ganancias y por el blanqueo, podemos decir que se sacó un muy bien 10 en materia fiscal”, dijo Polo.
En Cohen estiman que la relación entre ingresos y gastos debe tener una “separación” de 17 puntos para lograr ese objetivo. Y, en el primer semestre, los ingresos totales bajaron 5% y los gastos 30%. La brecha fue de 25 puntos.
El Gobierno puede recortar menos
Para el Instituto Argentino de Análisis Fiscal (IARAF), los números pueden oscilar entre dos alternativas: que el gobierno cierre 2024 en equilibrio perfecto, o que alcance un leve superávit del 0,4 puntos del PBI
Para ello, toma en cuenta que los ingresos totales bajarán 5% entre julio y diciembre, una caída del PBI del 3,5%, y el gasto en intereses de la deuda similar al de 2023.
“Dada la caída interanual real del 32,2% de enero a junio, en el primer escenario supuesto (equilibrio perfecto), el gasto primario debería caer un 20,6% en el segundo semestre”, indica el IARAF. Si se ajuste más de eso, habría déficit. Para que el año termine en cero, el gasto real en 2024 debería bajar 26,4%.
“En el segundo supuesto, el gasto primario real debería caer un 24,2% interanual en el segundo semestre para que se logre un superávit de 0,4% del PBI”, dice el estudio. En ese caso, en los 12 meses el gasto bajaría 28,2%
El estudio señala que “bajo los dos escenarios, el de equilibrio fiscal y superávit de 0,4% del PBI, el Gobierno nacional puede disminuir la intensidad del ajuste del gasto en el segundo semestre”.
En ese sentido, aclara que “proyectando el gasto en jubilaciones para el segundo semestre y utilizando para el resto de los gastos su participación durante el primero, prácticamente todos los gastos verían reducido el ritmo de descenso interanual, comparando el segundo semestre con el primero”.
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