Incógnita: qué hará Dolphin en Transener

«Creemos que elegimos la mejor alternativa; se trata de un fondo que tiene fuertes inversiones en energía en la región.» Así explicó a este diario Joao Bezerra, director de Gas y Energía de Petrobras Energía SA, la elección del fondo Eton Park Capital Management como comprador de su parte en Transener. A la elección de este fondo neoyorquino, que acaba de comprar los activos que tenía la fallida Enron en Brasil (la operación se llama Prima) se llegó después de una dura puja que involucró a por lo menos cinco postulantes, entre los cuales se contaron el grupo cordobés Electroenergía y un holding energético chileno, cuya identidad no trascendió.

«Quiénes presentaron ofertas es una de las informaciones cubiertas por el convenio de confidencialidad, por lo que no puedo comentar al respecto», afirmó el ejecutivo brasileño. «Quiero hacer notar además que vendimos un paquete accionario; no éramos ni operadores ni controlantes de Transener.»

Si bien el anuncio se hizo ayer, para que se concrete esta operación pasaría alrededor de un mes, lapso durante el cual se abrirá un período de exclusividad y se hará un «due dilligence». Recién entonces el Grupo Dolphin hará saber si ejerce alguno de los tres derechos que tiene sobre el capital de la empresa: el veto (podría impedir la entrada de Eton como socio), el «tag along» (podría obligar a Eton a comprarle también su parte) y el «first refusal» ( podría igualar la oferta presentada por Eton y quedarse con las acciones que eran de Petrobras). Una alta fuente de Dolphin dijo a este diario que «estamos analizando si haremos uso de alguno de ellos».

Es casi obvio, sin embargo, que esto no sucederá al menos con el de «first refusal»: la legislación vigente impide que una misma empresa sea controlante en transmisión y distribución; de usar ese derecho, Dolphin quedaría como controlante de Transener (transmisión) y de Edenor (distribución).

Ingreso

La venta de 50% de Citelec, que a su vez tiene 52,67% del capital de Transener, fue anunciada el martes y representará para la petrolera brasileña un ingreso de u$s 54 millones, monto al que sumará un adicional cuando el gobierno acceda a reajustar el cuadro tarifario de la transportadora. Cabe recordar que hace tres años, cuando Dolphin entró a la empresa comprándole su participación a la británica National Grid, les ofertó a los brasileños una suma cercana a los u$s 17 millones. «Pero era otra empresa; estaba en default, no habíamos renegociado la deuda, el país incluso era otro...», admitió el ejecutivo de Dolphin.

Por su parte, Bezerra enfatizó que «después de un proceso de depuración, llegamos a lo que consideramos la oferta más adecuada, tanto en lo económico como en otros aspectos». Petrobras estaba obligada a desinvertir en Transener desde que la compró entre los activos adquiridos a PeCom Energía. Tras varias idas y vueltas (la resolución original de Defensa de la Competencia no fijaba plazo para la venta; el año pasado la Secretaría de Energía les dio plazo hasta una fecha cierta, pero más tarde derogó esa norma entendiendo que eso conspiraba contra la obtención de un valor razonable; en el medio, Dolphin presentó una oferta, etc.), Petrobras encontró «la novia» para su tenencia en la transportadora. «El gobierno no quería generar presión sobre nosotros para que termináramos malvendiendo el activo», agrega el petrolero.

¿Qué harán con el monto de la venta? Responde Bezerra: «Lo aplicaremos a nuestro plan estratégico de inversiones 2005/2010, sobre todo en exploración y en petroquímica; también en la ampliación del gasoducto (tramo sur y tramo norte), donde invertiremos u$s 30 millones. Quiero aclarar que no tenemos ningún impedimento para entrar en transporte de electricidad». Agrega que él mismo tomó la decisión de permanecer en Transener hasta ahora, «porque sabíamos que el país iba a recuperarse y que nosotros renegociaríamos bien la deuda. Todo eso pasó».