• SOBRE-BOMBA ESTALLÓ EN OFICINAS DE INDRA, CAUSANDO HERIDAS LEVES A DOS EMPLEADOS Interviene la Justicia federal. Paquete iba dirigido a Recursos Humanos. Investigan a motoquero que hizo la entrega. No afecta conteo en las PASO.
Atentado. El estallido provocó algunos daños menores en Indra.
En un episodio que contó con todas las características de un atentado terrorista con objetivo de crear una situación de incertidumbre previa a las elecciones, un artefacto explosivo de baja intensidad -disimulado en un envío postal- estalló en las oficinas de la multinacional española Indra, encargada del conteo provisorio de los resultados en las PASO. Dos personas de la compañía fueron hospitalizadas con heridas leves y comenzó una investigación federal a cargo del juez Daniel Rafecas, quien solicitó -como primeras medidas- la obtención de todas las cámaras de seguridad, el análisis de peritos del dispositivo y las declaraciones testimoniales de los empleados de la compañía, que desde 1997 obtuvo las licitaciones para el recuento provisional del escrutinio. El sobre-bomba estaba dirigido a la Dirección de Recursos Humanos de Indra, lo que disparó una segunda posible hipótesis de un conflicto interno, sobre la que también trabaja la justicia.
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El estallido, con pocos daños materiales, ocurrió a las 16.15, en la recepción de las nuevas oficinas de Indra, ubicada en el quinto piso del edificio Madero Riverside de la calle Cecilia Grierson 255, en Puerto Madero. Allí, la recepcionista Ayelén García de 27 años, abrió un paquete de 10 x 20 centímetros, que había sido dejado por un motoquero el 8 de agosto pasado, en la anterior sede de la firma, en Paraná 1073. De acuerdo a las averiguaciones, un cadete de Indra derivó la correspondencia a las nuevas oficinas que fue abierta ayer por la tarde. El paquete-bomba estaba dirigido al área de Recursos Humanos de la compañía pero sin el nombre de ninguna persona y con el genérico "Indra". Por este motivo fue que García procedió a su apertura.
La recepcionista fue atendida por el SAME ante la llamada de emergencia y trasladada al Hospital Argerich con lesiones leves y algunos cortes en el rostro, aunque no presentaba quemaduras. Tras las primeras curaciones fue derivada a un sanatorio de una prepaga. Emanuel Coledani de 38 años también sufrió heridas leves en su mano y fue dado de alta a las pocas horas. Prefectura Naval y la División Explosivos de la Policía Federal fueron las encargadas de las primeras averiguaciones, centradas en la sede anterior de la multinacional, con el pedido de cámaras de seguridad aledañas. El objetivo: identificar la matrícula de la moto que entregó el paquete.
El fiscal Guillermo Marijuan, a contra mano de los primeros hallazgos, sostuvo que el artefacto era de "máxima peligrosidad". Desde el Ministerio de Seguridad afirmaron que en un análisis preliminar se trataba de un dispositivo poco sofisticado que tenía un resorte dentro de un caño de tres cuartos, con poca pólvora que con su apertura activó la dispersión de municiones de calibre 16.
La Justicia federal intervino de inmediato ante la hipótesis de máxima: que se tratara de un atentado terrorista cometido por alguna organización. Caratulado como "lesiones", el expediente también se abre a otras líneas de investigación que comprendan también algún tipo de conflicto interno. Indra se puso a disposición de la justicia, aunque descartaron cualquier inconveniente para el recuento que se llevará a cabo el domingo ya que el personal destinado a esa tarea está trabajando en la sede del Correo Argentino. Solicitarán el refuerzo de la seguridad en esas instalaciones para asegurar el normal desenvolvimiento del conteo provisorio.
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