Horror: le envió una torta envenenada a su amiga y la mató

El caso, que causó un fuerte impacto en la opinión pública, ocurrió en el barrio Itapecerica da Serra. Los escalofriantes detalles.

Ana Luiza Oliveira Neves fue envenenada por sus amigas

Un trágico y desconcertante crimen ha conmocionado a la ciudad brasileña de San Pablo, Brasil, tras la muerte de Ana Luiza Oliveira Neves, una adolescente de 17 años que falleció luego de consumir una torta envenenada que habría sido enviada por una de sus amigas con motivo de su cumpleaños.

El caso, que ha causado un fuerte impacto en la opinión pública, ocurrió en el barrio Itapecerica da Serra. La joven recibió un paquete que contenía la torta junto a una tarjeta sin firma, adornada con corazones y palabras elogiosas: “Para la chica más hermosa que he visto en mi vida, con la personalidad más increíble que conozco”. Emocionada, Ana Luiza compartió su sorpresa a través de un mensaje de voz en un grupo de amigas, manifestando su deseo de descubrir quién le había hecho tan especial regalo.

Sin embargo, lo que parecía un gesto afectuoso se transformó en tragedia. Aproximadamente una hora después de consumir el pastel, Ana comenzó a sentirse mal. Fue llevada de urgencia a un centro médico, donde recibió atención por una posible intoxicación y fue dada de alta. Horas después, se desmayó en el baño de su casa. A pesar de un nuevo traslado al hospital, no logró sobrevivir a un paro cardiorrespiratorio.

Consternación en San Pablo por la muerte de una joven envenenada con una torta enviada por una amiga

La policía civil investiga el hecho como un homicidio premeditado. Según reportes de medios locales como Globo y Universo Online, una compañera de la víctima, también de 17 años, habría confesado haber colocado óxido de arsénico en la torta. La adolescente en cuestión incluso había pasado el fin de semana en casa de la familia Neves y fue testigo de todo el proceso: desde que Ana comenzó a sentirse mal, hasta el momento en que colapsó.

Silvio Ferreira das Neves, padre de la víctima, expresó su dolor e indignación: “Mi hija era inocente, confiaba en todos. Esta chica estuvo en mi casa, durmió con mi hija, me abrazó al día siguiente y me dijo que todo estaría bien, mientras sabía exactamente lo que había hecho”.

Una compañera de la víctima, también de 17 años, habría confesado haber colocado óxido de arsénico en la torta.

Las investigaciones también revelaron que esta no sería la primera vez que la joven acusada intentaba envenenar a una compañera. En una ocasión anterior, otra adolescente habría sufrido síntomas similares tras ingerir alimentos contaminados, aunque logró recuperarse. La motivación detrás del crimen, según la policía, habría sido una mezcla de celos y resentimiento.

Por su parte, la panadería “Menina Trufa”, señalada inicialmente por haber elaborado la torta, se desligó del hecho con un comunicado en el que asegura que el producto salió de sus instalaciones en buen estado, y que desconocen lo que ocurrió después.

El caso continúa en investigación, y ha reavivado el debate en Brasil sobre la salud mental en adolescentes, el acceso a sustancias tóxicas y la prevención de la violencia entre jóvenes.