Movilidad internacional: reflexiones y guía para ejecutivos en la economía global

Vivir en un mundo globalizado significa que las fronteras geográficas limitan cada vez menos la actividad de las personas y las empresas. Los profesionales muchas veces encuentran mejores oportunidades en otros países u otras ciudades, y las compañías trasladan sus instalaciones o inician nuevos proyectos en ubicaciones diferentes. Esto, conocido como relocalización laboral, creció significativamente debido a la globalización y a las diversas formas en que las empresas se internacionalizan o expanden más allá de sus fronteras. Factores como la necesidad de atender a clientes de manera más directa o relocalizar plantas de producción por motivos económicos impulsan este fenómeno.

Desde el inicio de los años 70 y más intensamente a partir de 1980 se produjo una creciente internacionalización de los procesos productivos. La producción se fragmentó y deslocalizó articulándose las Cadenas Globales de Valor (CGV), en las que cada etapa de la producción se lleva a cabo allí donde los recursos y las habilidades están disponibles en las mejores condiciones posibles en cuanto a precio y calidad. Este fenómeno supuso una importante transformación de la economía global en pro de la integración internacional.

De esta manera el horizonte laboral se expande más allá de cualquier frontera, abriendo la posibilidad de emprender una carrera en tierras extranjeras o, aun dentro del país, a zonas alejadas de nuestro lugar de residencia y sede laboral habitual. Ya sea por la búsqueda de empleo o por una oferta de la empresa para asumir un nuevo puesto, la decisión de relocalizarse es crucial y requiere una profunda reflexión. Un informe de Boston Consulting Group titulado “Aprovechando las Transformaciones Tectónicas en la Manufactura Global” destaca que más del 90% de las empresas manufactureras en América del Norte reubicaron parte de sus procesos de producción o de su cadena de suministro en los últimos cinco años, y planean continuar haciéndolo debido a la incertidumbre geopolítica y los altos aranceles en Estados Unidos.

Nuevos datos de la SEC muestran que casi el 9% de las corporaciones que cotizan en bolsa en Estados Unidos, o 593 empresas, trasladaron sus sedes en el año fiscal que abarcó de marzo de 2022 a marzo de 2023. Esto marca la tasa de reubicación más alta en siete años, luego de una caída por debajo del 7% en 2020 debido a la pandemia. Comparando cifras año tras año, el número de corporaciones que reubicaron sus sedes aumentó un 29% desde 458 en 2021-22. La tendencia a la reubicación de las sedes corporativas aumentó y cada vez más empresas optan por trasladar sus oficinas por diversos motivos. Las cifras indican un cambio significativo en el panorama corporativo y las operaciones comerciales.

El aumento actual de empresas que reubican sus sedes es el más significativo en una década, superando incluso el repunte observado después de la pandemia en 2012-22. Este año está resultando extraordinario, con un aumento del 25% en el número de empresas que trasladan sus oficinas centrales.

El caso de Argentina: talento en movimiento

En Argentina, este fenómeno es igualmente notable. Según la última encuesta "CEO Survey" realizada por PwC, el 80% de los empresarios argentinos considera que la “volatilidad macroeconómica” es el mayor obstáculo para el desarrollo profesional en el país. Además, el 60% de los CEOs encuestados entiende que esto dificulta la “retención y atracción de talento”. No es sorprendente que ocho de cada diez argentinos consideren la posibilidad de emigrar si tuvieran las condiciones adecuadas, según un estudio de Taquión Research Strategy. Esta tendencia convierte a Argentina en un "gran exportador de perlas", con ejecutivos y CEOs argentinos buscados en todo el mundo.

La movilidad geográfica sigue siendo un elemento de desarrollo profesional fundamental, ofreciendo a los trabajadores una oportunidad de aprendizaje constante. La relocalización para trabajar en otro país puede ser la clave para impulsar la carrera al siguiente nivel. Las empresas a menudo buscan perfiles profesionales con experiencia internacional, ya que esta experiencia puede aportar una perspectiva única y valiosa. Además, trabajar en un entorno culturalmente diverso brinda la oportunidad de ampliar los horizontes y fortalecer las habilidades interpersonales.

Pero relocalizarse en otro país por trabajo no está exento de desafíos. Ajustarse a un nuevo entorno cultural y social puede llevar tiempo. Sin embargo, muchos profesionales encuentran que los beneficios a largo plazo superan con creces los desafíos iniciales. La posibilidad de crecimiento profesional, el desarrollo de habilidades interculturales y la construcción de una red global pueden marcar una diferencia significativa en la carrera de un ejecutivo.

Recomendaciones para una relocalización exitosa

Para las empresas

Las empresas deben considerar varios factores al relocalizar a sus ejecutivos:

• Costos y Beneficios: evaluar los costos de reubicación y los beneficios esperados.
• Adaptación Cultural: proporcionar apoyo cultural y logístico para facilitar la transición del ejecutivo y su familia.
• Paquetes de Reubicación: diseñar paquetes atractivos que incluyan vivienda, educación para los hijos y otros beneficios.

Para los ejecutivos

Por su parte, los ejecutivos que se enfrentan a una relocalización deben considerar:

• Investigación: Conocer a fondo el país de destino, incluyendo el costo de vida, la calidad de vida y las oportunidades laborales.
• Aspectos Legales: Asegurarse de cumplir con todos los requisitos legales y de visa.
• Ajuste Cultural: Prepararse para los desafíos culturales y sociales de vivir en un nuevo entorno.
• Red de Apoyo: Desarrollar una red de contactos tanto profesional como personal en el nuevo país.

Pasado en limpio y al detalle, un ejecutivo que va a migrar debería hacerse algunas o todas estas preguntas para evaluar su paquete de reubicación:

• ¿Cuánto tiempo estima que durará su estancia?
• ¿Qué conoce del país y de la empresa que le contrata?
• ¿Cuáles son los costos reales de vivir en el país de destino?
• ¿Qué cultura impera?
• ¿Qué opciones de ocio me ofrece la ciudad o país?
• ¿Es una opción temporal o lo contempló como un cambio a largo plazo?
• ¿Cómo es la educación para mis hijos?
• ¿Podrá mi pareja acceder fácilmente al mercado laboral con su especialización o titulación?
• ¿Hay posibilidad de negociar algunos apartados del paquete?
• ¿Qué servicios de los ofertados cuentan con asesoramiento?
• ¿Cuáles son las condiciones de repatriación?

La decisión de relocalizarse es más que una simple mudanza; es una transformación que involucra tanto al individuo como a la organización. Los beneficios potenciales son vastos, desde el desarrollo de una perspectiva global hasta la posibilidad de acceder a mercados emergentes. A medida que el mundo continúa integrándose, la habilidad para adaptarse y prosperar en diferentes contextos culturales se convierte en una ventaja competitiva crucial.

Además, la relocalización no solo beneficia a los individuos, sino que también fortalece las empresas al proporcionarles líderes con experiencia internacional y habilidades interculturales. En este contexto, la movilidad geográfica emerge no solo como una necesidad corporativa, sino como una oportunidad estratégica para impulsar la innovación y el crecimiento sostenido en el competitivo mercado global.

Gerente General de Metrar Group