Tras la denuncia de la interventora de la AFI, Cristina Caamaño, sobre un supuesto espionaje ilegal durante el macrismo, la comisión bicameral de Fiscalización de los Organismos y Actividades de Inteligencia, que comanda el diputado kirchnerista Leopoldo Moreau, le pidió al organismo que amplíe la información con respecto al seguimiento de políticos de los entonces oficialismo y oposición, y también a periodistas, entre otros.
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El conjunto pidió que la AFI amplíe la información con respecto al seguimiento de políticos de los entonces oficialismo y oposición. La reunión fue "formal" y en "buenos términos", confiaron fuentes a Ámbito.
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El acompañamiento de legisladores de los bloques que integran dicho cuerpo del Congreso disminuyó la excesiva tensión generada en las últimas 48 horas y dejó claro que la que tiene que avanzar ahora es la justicia.
Según confiaron desde diferentes bancadas a Ámbito, la reunión fue “formal” y en “buenos términos”, excepto por un cruce que tuvo un legislador opositor con el senador cristinista Oscar Parrilli, exjefe de la AFI. Desde un despacho contaron a este medio que le recordaron cuando, años atrás, “le encontraron a Cristina de Kirchner en su hogar carpetas con información de empresas y escuchas de opositores Francisco de Narváez”, tras un allanamiento realizado en Santa Cruz.
En la denuncia presentada por la AFI de Caamaño se solicitaron las indagatorias del expresidente Mauricio Macri y de la dupla que comandaba el organismo, Gustavo Arribas y Silvia Majdalani. Al término de la reunión, Moreau advirtió que este tipo de situaciones “traen aparejado invadir la privacidad de las personas; tratan de limitar la participación del ciudadanos en la vida política, gremial y religiosa; abre las puertas a la extorsión cuando se invade la vida privada de los ciudadanos y ha servido para alimentar, en connivencia con sectores judiciales, causas inventadas, supuestos testigos y falsos arrepentidos”.
Por su parte, el jefe del PRO en la Cámara baja e integrante de la bicameral, Cristian Ritondo, señaló: “Confío en justicia federal, pero descarto que por alguna orden política haya habido algún trabajo de esta característica”. Además, el legislador le bajó la espuma a la operación realizada en las últimas horas para enlazar al exagente José Luis Vila como un “arrepentido”: sólo se continuó con el análisis y requerimientos en las causas abiertas por las persecuciones que adujo sufrir en los últimos años, que incluyen un paquete sospechoso en la puerta de su casa detonado por fuerzas de seguridad “por precaución”. Él apunta al aparente espía Melo.
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