El intendente la localidad chubutense de Comodoro Rivadavia, Carlos Linares, se refirió a la crisis petrolera que atraviesa su distrito y dijo: "No amenazamos ni mucho menos, pero tenemos que tener cuidado. No queremos que, como en el '98, Comodoro sea un pueblo fantasma".
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En diálogo con el programa "La Tarde" de Radio 10, el jefe distrital explicó que las dos compañías petroleras que operan en la zona son Tecpetrol y Panamerican y que, la primera de ellas "anticipó 400 despidos", mientras que la segunda "tiene anunciados 2.300 despidos a partir de febrero".
En esa línea, Linares afirmó que "el problema se da en forma directa y se va a escalonando, porque están los contratistas y subcontratistas, serían 6.000 personas a la calle en menos de 30 días. Se tornaría un caos social y una ciudad ingobernable".
Sin embargo, el intendente dejó entrever un halo de optimismo al asegurar que "estas crisis no son para toda la vida", ya que. "cada cierto tiempo se producen vaivenes en el precio de los petróleos, luego este vuelve a su cauce normal".
Además, el político patagónico le exigió al ministro de Energía Juan José Aranguren que "no mire la cuestión con ojos de CEO"
A su vez, afirmó que confía en que Rogelio Frigerio, ministro del Interior, "observe la cuestión política".
Posteriormente, entrevistado por el programa "El Diario de la Tarde" del canal C5N, el chubutense estimó que, sino hay una solución al conflicto de fondo, la situación culminará en un "paro general que afectará a toda la provincia".
"En vez de amenazarnos, tienen que buscar una alternativa para ver cómo lo podemos solucionar", concluyó Linares.
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