Durante una cena privada organizada en el Yacht Club de Puerto Madero, el presidente Javier Milei encabezó un encendido discurso donde lanzó duras acusaciones contra dirigentes opositores, a quienes calificó como “parásitos mentales”. El evento tuvo como finalidad recaudar fondos de cara a las elecciones legislativas de octubre, en las que el oficialismo buscará consolidar su posición en el Congreso.
"Parásitos mentales" y "soy cruel kukas inmundos", el feroz discurso de Javier Milei contra la oposición
El Presidente se expresó durante una cena en Puerto Madero para recaudar fondos. Con la mira en las próximas elecciones, los cuestionamientos a sus opositores no tardaron en llegar.
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Javier Milei dio un discurso con duras críticas a la oposición.
La actividad comenzó a las 19 en el salón del club náutico ubicado entre Olga Cossettini y Victoria Ocampo, en el Dique IV. La convocatoria reunió a referentes de La Libertad Avanza (LLA), miembros del Gabinete, empresarios y otras figuras afines al espacio oficialista. Milei ingresó después de las 21 y fue el único orador.
El discurso de Javier Milei
En tono de campaña, Milei volvió a marcar diferencias con el peronismo bonaerense, apuntando en especial contra la gestión de Axel Kicillof, a quien volvió a denominar “El Soviético”. Aseguró que su espacio mantiene una posición de outsider dentro del sistema político, “aun estando en el poder”.
“Hoy los niveles de imagen personal y de gestión están similares a cuando iniciamos la Presidencia. Estamos en condiciones de dar un tremendo batacazo en septiembre en la Provincia y en octubre en todo el país”, afirmó ante funcionarios, empresarios y dirigentes libertarios.
Las fechas clave mencionadas por el mandatario refieren a las elecciones del 9 de septiembre en la provincia de Buenos Aires para cargos legislativos locales, y del 26 de octubre para la elección nacional de diputados y senadores.
"Parásitos mentales”
En uno de los tramos más polémicos de su intervención, el Presidente retomó las declaraciones del abogado chileno Axel Kaiser, quien acusó al progresismo y al feminismo de generar “sistemas de creencias enfermizos”. Kaiser había dicho: “La gente de izquierda es más triste que los conservadores. El sistema de creencias progresista, entre los que se encuentra el feminismo radical, todo ese tipo de cosas, te enferman. Y eso explica también por qué muchas personas que están en estos círculos se vuelven violentas. La Argentina tiene un sector de la población al que se le ha repetido tanto estos parásitos mentales que han sido infectados. Los seguidores del kirchnerismo, del feminismo, del peronismo”.
Milei se alineó con esa afirmación y redobló la apuesta. “Enfrente tenemos unos orcos infumables. Como dice Axel Kaiser: parásitos mentales. Tienen la cabeza llena de todas las porquerías malas”, disparó.
Durante su discurso, el mandatario también cargó contra los gobernadores provinciales, a quienes acusó de no respetar los compromisos asumidos en el Pacto de Mayo. “Hace un año, gran parte de los gobernadores firmaron un Pacto de Mayo para reducir el gasto público al 25% del PBI, pero ninguno de ellos hizo el ajuste en su jurisdicción, faltándole el respeto a la sociedad que dicen representar”, lanzó.
Esta afirmación se produjo en un contexto de creciente tensión entre la Casa Rosada y las provincias, que reclaman por los recortes en giros y transferencias que Nación mantenía hasta fines de 2023.
Javier Milei de cara a las elecciones de octubre
El tono general de la alocución rememoró al Milei de campaña presidencial. Con un estilo confrontativo y mensajes dirigidos a reforzar la identidad de su espacio como “anticasta”, el mandatario buscó recuperar la energía y el respaldo que lo llevaron al sillón de Rivadavia en noviembre del año pasado.
También embistió contra economistas y periodistas críticos. “Muchos de los que hablan no entienden de economía. Critican lo que no conocen y operan porque perdieron sus privilegios”, dijo sin hacer nombres, pero dejando claro su malestar con quienes cuestionan la recesión, la caída del consumo y la falta de dinamismo económico.
La cena también funcionó como un espacio de recaudación clave para la campaña legislativa. Según fuentes cercanas a la organización, la presencia de empresarios afines garantizó una base de apoyo económico para la estructura libertaria.
Funcionarios del entorno presidencial destacaron la voluntad del mandatario de mantener un vínculo directo con sus votantes más fieles, aun en un contexto económico adverso y con encuestas que muestran una caída de la imagen presidencial en algunas provincias.
"Soy cruel, kukas inmundos"
Desde el entorno de Milei evalúan que, para mantener o aumentar su número de bancas en el Congreso, deberán obtener una buena performance en Buenos Aires, donde la elección será clave para el reparto de diputados nacionales. Allí, la figura de Axel Kicillof vuelve a posicionarse como el principal adversario político.
La estrategia del oficialismo se centra en reforzar la idea de “todo o nada”, en la que el avance legislativo de las reformas dependerá del resultado en las urnas.
Para cerrar, Milei no ahorró epítetos ni consignas. “Soy cruel, kukas inmundos”, gritó desde el escenario ante los aplausos del público. Con esa frase buscó reafirmar su estilo, su narrativa confrontativa y su objetivo de llevar adelante una transformación profunda, sin concesiones con sus adversarios políticos.
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