UCR: dará libertad de acción para los distritos rebeldes

Margarita Stolbizer

La convención nacional de la UCR aprobará la libertad de acción en los distritos gobernados por radicales que avalan una concertación con la Casa Rosada así como en la provincia de Buenos Aires, donde Margarita Stolbizer rechaza sumarse a un acuerdo con Roberto Lavagna. La decisión la adoptó ayer la mesa nacional del partido como medida in extremis para evitar que la secretaria general del radicalismo y los gobernadores de Mendoza, Río Negro, Santiago del Estero, Corrientes y Catamarca fracturen a la centenaria agrupación.

La convención, que sesionará el 23 y 24 de marzo en Capital Federal, respaldará una coalición con el ex ministro de Economía y proclamará como su compañero de fórmula a un radical porque de lo contrario «no será posible integrar ese acuerdo», sostuvo el titular de la UCR, Gerardo Morales.

Morales formuló estos anuncios al término de una reunión de la mesa directiva del comité nacional donde expuso un informe sobre la ronda de contactos que mantuvo con otras fuerzas políticas. El rechazo del ARI de Elisa Carrió, una futura reunión la primera quincena de febrero con el socialismo de Rubén Giustiniani y la falta de diálogo con el PRO de Mauricio Macri fueron los puntos salientes de la exposición de Morales.

La decisión de aprobar la libertad de acción en los distritos partidarios, explicó Morales, no se aplicará al ámbito nacional donde Julio Cobos (Mendoza), Miguel Saiz (Río Negro), Arturo Colombi ( Corrientes), Gerardo Zamora (Santiago del Estero) y Eduardo Brizuela del Moral ( Catamarca) impulsan un acuerdo con Néstor Kirchner.

Oposición

«No es posible, eso no puede ser aprobado», dijo Morales cuando se lo consultó acerca de la libertad de acción que impulsan algunos distritos partidarios para la elección nacional de octubre, y agregó: «Instamos a esos sectores a respetar las decisiones que tome la convención».

Morales subrayó que las sanciones a los distritos partidarios que no acuerdan con la línea del comité nacional «están paradas», aunque reconoció que en Mendoza «la situación es difícil porque hay una intervención en danza».

Sobre Catamarca, donde el radical Frente Cívico y Social acordó con el kirchnerista Frente para la Victoria para las elecciones provinciales, Morales afirmó que «tiene el respaldo del comité nacional», aunque insistió que también ese distrito debe encolumnarse con la convención en los comicios nacionales.

En cuanto a Stolbizer, que durante la reunión de la mesa ratificó su disidencia respecto a Lavagna,Morales remarcó: «Los que quieren candidatos propios ya tendrían que estar trabajando en ese sentido».

La otra decisión importante de la convención será la elección de un radical como compañero de fórmula de Lavagna -posiblemente Morales o el senador Ernesto Sanz-que el ex ministro deberá aceptar para que la coalición sea posible, como adelantó el presidente del comité nacional.

En ese marco, los equipos técnicos de la UCR y del lavagnismo se reunirán todos los martes de febrero en la sede del comité nacional para delinear el programa de la coalición.

Del encuentro de la mesa directiva participó el presidente de la convención nacional, Adolfo Stubrin, quien calificó la reunión como «muy positiva» y adelantó que «ésta será una semana decisiva para ir conformando las alternativaspolíticas». También estuvieron los legisladores Ernesto Sanz y Fernando Chironi, además de Horacio Pernasetti, ex presidente del bloque de la UCR y actual miembro de la Auditoría General de la Nación.

Morales, en tanto, mantendrá hoy una reunión con Lavagna a partir de las 16 en las oficinas del ex ministro, ubicadas en Diagonal Norte 1160. El presidente de la UCR sigue paso a paso los contactos con el lavagnismo y tiene previsto visitar varias provincias en compañía del ex ministro.

El estrecho margen que dejarála convención a los radicales contrarios a Lavagna -concretamentea la corriente de Stolbizer-no prenuncia rupturas. Stolbizer está midiendo la posibilidad de ser candidata a gobernadora bonaerense y aunque se oponga a Lavagna en la convención «no sacará los pies del plato», dijeron fuentes partidarias.

Las dificultades se presentan con los radicales K, que tal vez no envíen representantes a la convención, porque Morales no quiere sancionarlos ni romper en caso de que éstos se encolumnen definitivamente con el kirchnerismo.