13 de octubre 2001 - 00:00

Crece la tendencia al cultivo de la soja

La utilización de la siembra directa beneficia el cultivo de soja y provoca un aumento de la superficie a sembrar.
La utilización de la siembra directa beneficia el cultivo de soja y provoca un aumento de la superficie a sembrar.
Siguiendo la misma tendencia que en el año anterior, el cultivo de soja continúa ganando superficie a expensas del resto de los cultivos de gruesa.
La principal causa de esto es el beneficio económico que representa este cultivo ya que permite obtener una mayor rentabilidad por superficie.

Planteo

Dicho planteo nace de la base de la utilización de la siembra directa como nivel tecnológico a emplear, lo que eficientiza el manejo de las labores y utilización de agroquímicos.

Analizando los costos directos por hectárea y por cultivo se observa lo siguiente: el cultivo de maíz posee costos directos del orden de los $ 171/ha a diferencia de los $ 76/ha que posee la soja.

Esta importante diferencia de 55% es lo que llevó a muchos productores a decidirse a favor de la soja debido a que existe, este año, una gran limitante financiera en el sector agropecuario lo que lleva a los productores a intentar endeudarse lo mínimo imprescindible.

Desglosando los costos directos por rubro y comparándolos respecto de la campaña anterior, se observa un incremento importante en tres rubros determinantes. El primero seria las semillas, las cuales presentan un incremento en sus costos porque los precios de los granos se han elevado respecto a la campaña pasada y existen problemas de oferta de semillas de calidad.

Labores

El segundo rubro que presenta un incremento respecto a la campaña pasada son las labores, donde la continua suba en la carga impositiva al gasoil afecta en gran medida a los productores pequeños a medianos, los cuales no pueden descargar dicho importe en Ganancias.

Por último se encuentran los fertilizantes donde el incremento en el precio de los combustibles (a nivel mundial) ha obligado a dichas industrias corregir sus valores.

Este último factor es sumamente negativo para el cultivo de maíz donde el uso de fertilizantes es vital para lograr expresar el potencial de rinde de los nuevos híbridos.

Comparando los resultados de los márgenes brutos de ambos cultivos se observa que la soja supera, en rentabilidad por hectárea, al maíz en 5% destacándose aun más el beneficio que presenta la soja en la ganancia por peso invertido. De igual manera para garantizar dichos márgenes, sin importar el cultivo, es de suma importancia el utilizar las herramientas de coberturas tales como los mercados de futuros y opciones y también el uso de seguros multirriesgos estabilizando así las variables precio y rendimiento.



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