El técnico de Boca Juniors, Carlos Bianchi, dio "por supuesto que Independiente mereció ganar" el clásico empatado 1-1 en Avellaneda, por la séptima fecha del torneo Final.
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El entrenador de 63 años, expulsado del campo antes de comenzar el segundo tiempo por su ingreso tardío, vinculó la superioridad del rival al factor de haber jugado "casi 80 minutos con un hombre más" por la expulsión del defensor Christian Cellay.
"Tuvimos que rearmar la defensa y el partido se volvió muy complicado para Boca. Quizás si el expulsado hubiese sido en la delantera o el mediocampo la historia hubiese sido distinta", especuló.
En relación al arbitraje de Saúl Laverni, Bianchi se excusó de opinar hasta "ver por televisión las jugadas" que derivaron en el penal de Claudio Pérez a Luciano Leguizamón (atajado por Agustín Orión), la expulsión de Cellay y el gol de Claudio Morel Rodríguez (Ernesto Farías estaba adelantado).
Luego, advirtió que hará "una petición o reclamo" ante la Asociación de Técnicos del Fútbol Argentino (ATFA) para que tomen "alguna medida" en relación salida del campo determinada por Laverni.
"Tardamos dos minutos y medio en llegar al vestuario visitante y otros dos minutos y medio en volver al campo", advirtió en relación a la distancia que separa los bancos de los camarines en el estadio "Libertadores de América".
Finalmente, sobre las chances de Boca en el torneo Final, el entrenador de Boca opinó: "Si quedamos muy lejos o no (a nueve puntos del líder Lanús, que juega el lunes) lo sabremos recién sobre el final del campeonato. Ahora el objetivo es el miércoles".
Ese día, Boca recibirá a Barcelona de Ecuador en un partido de la penúltima fecha del grupo 1 de la Copa Libertadores de América, que será clave para aspirar a la clasificación a la ronda final.
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