11 de mayo 2019 - 22:28

El heredero hizo caer a Nadal en Madrid, donde ya festejó la nueva campeona

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Agencia NA

Rafael Nadal perdió este sábado en semifinales del Masters 1000 de Madrid frente al griego Stefanos Tsitsipas, que se enfrentará a Novak Djokovic el domingo por el trofeo madrileño, que ya levantó este sábado en el cuadro femenino la holandesa Kiki Bertens.

El español perdió con Tsitsipas por 6-4, 2-6 y 6-3, y suma así una nueva derrota en semifinales tras las de Montecarlo y Barcelona. Nunca antes había perdido en semis o final de los torneos de su país. Hasta el momento no había pasado que llegara a Roland Garros sin títulos previos, y este año sólo jugó una final, la del Abierto de Australia que perdió ante Djokovic.

Rafa cayó en dos horas y 34 minutos ante un Tsitsipas eléctrico, letal con sus subidas a la red y con su saque, pero que reconoció que "ha sido una de las victorias más difíciles" de su carrera y la primera contra Nadal tras cuatro enfrentamientos.

Tras perder el primer set, el manacorí reaccionó, empujado por el público que llenaba la Caja Mágica, para llevarse el segundo, pero en el tercero Tsitsipas volvió a reactivarse.

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El griego, que parecía llegar a todas partes, le quebró a Nadal para ponerse 3-2 y consolidar su ventaja con su servicio. El hijo pródigo empezó a sentir la presión, multiplicando errores, hasta que volvió a perder su saque para dejar a Tsitsipas 5-3 por delante y sirviendo para el partido.

Acostumbrado a la épica, Rafa logró levantar tres match points, antes de que el griego se llevara el encuentro.

El griego se enfrentará en la final a Djokovic, que ganó en la otra semifinal al austriaco Dominic Thiem 7-6 (2) y 7-6 (4). "Nole" se mostró mucho más sólido en un disputado partido frente al número 5 del mundo, que llegaba a su tercera semifinal consecutiva en Madrid, donde perdió en la final los dos últimos años.

El austriaco, ganador en Barcelona y verdugo la víspera del suizo Roger Federer en cuartos, pareció no aguantar la presión en los momentos decisivos del tie break.

En el primer parcial, Thiem le rompió el servicio al serbio en el tercer juego para ponerse en ventaja 3-1, pero Djokovic remontó para llevar el set al desempate, donde se impuso el número uno del mundo.

La segunda parte siguió por los mismos senderos, con un break de Thiem en el sexto game contrarrestado por Djokovic en el siguiente para ponerse 4-3 y confirmar la igualdad 4-4 con su servicio.

En el undécimo juego, el balcánico volvió a quebrar para ponerse 6-5, pero cuando servía para el partido perdió su saque con una doble falta y el partido fue otra vez a la muerte súbita, donde se impuso.

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En su segunda final consecutiva en la capital española, la holandesa Kiki Bertens alzó por fin el trofeo tras ganar a la rumana Simona Halep, doble ganadora, en 2016 y 2017, por un doble 6-4.

Con su victoria, Bertens se asegura el cuarto puesto del ranking mundial a partir del lunes, mientras que privó a su rival, número tres, de poder arrebatar el número uno a la japonesa Naomi Osaka.

Bertens empezó sufriendo ante una Halep agresiva, las tornas se cambiaron cuando con 4-2 a favor de la rumana, la holandesa encadenó seis games consecutivos, desorientando a su rival.

Más firme, en el segundo set, la campeona siguió defendiéndose bien y jugando profundo.

Con 5-4 a favor de Bertens, Halep logró levantar dos puntos para campeonato, pero solo para retrasar lo inevitable cuando la nueva reina no falló en el tercero.

Bertens sucede en el trono madrileño a la checa Petra Kvitova, su verdugo del pasado año y de la que se vengó en esta edición eliminándola en cuartos de final.

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