La dolarización de depósitos es de 70%

Luego de la incipiente recuperación que habían mostrado los depósitos totales del sistema financiero a partir del 23 de agosto pasado, los mismos han vuelto a revertir su tendencia y en lo que va de octubre muestran una caída superior a los u$s 1.800 millones. Esto implica que prácticamente toda la recuperación anterior ya se ha esfumado e indica una fuerte tendencia hacia la dolarización de los depósitos en el sistema financiero que ya alcanza casi a 70% del total de los mismos frente a 61% que se observaba al principio de la fuga, el 28 de febrero pasado.

Hoy, de un total de 72.296 millones de depósitos bimonetarios, unos 49.800 están nominados en dólares, el porcentaje más alto registrado desde la vigencia de la convertibilidad y muy por encima de 58% que se observaba en diciembre del '99, cuando la Alianza llegó al poder.

Si consideramos como fecha de inicio de la crisis de credibilidad el momento previo a la renuncia del ex ministro de economía José Luis Machinea, podemos diferenciar cinco etapas en esta contracción donde los depósitos bimonetarios pasaron de 85.755 millones el 28 de febrero de 2001 a 72.279 millones entre la ida de Machinea y el 16 de octubre pasado, lo cual implica una pérdida total para el sistema de unos 13.500 millones.

• Comienzo

Etapa I: desde un nivel de 85.755 millones el 28 de febrero, los depósitos totales comienzan a descender hasta alcanzar los 79.262 millones, el 11 de mayo. Dicho período muestra entonces una retracción de 6.493 millones en 72 días, representando una merma diaria de 90,2 millones (-0,11%). La dolarización llegó a 64% desde 61% registrado al inicio de esta etapa en tanto que las tasas en pesos y en dólares para plazos fijos a 30 días eran de 13,9% y 8,9% anual respectivamente.

Etapa II: los rumores sobre el megacanje de deuda sirvieron para aumentar, aunque momentáneamente, la confianza en el sistema, de manera que los depósitos detuvieron su tendencia negativa y comenzaron a crecer hasta alcanzar 81.586 millones el 1 de julio. Dicho comportamiento significó un incremento de 2.324 millones (+2,9%), representando una suba diaria de 45,6 millones. En este período la dolarización se mantuvo en 64 por ciento y las tasas llegaron a 11,4% y 8,8% en pesos y en dólares, respectivamente.

Etapa III: a partir de dicho nivel, y como consecuencia de una nueva crisis política, en julio se evidenció un nuevo descenso de las imposiciones totales, esta vez mucho más pronunciado, que significó una pérdida de recursos de 9.567 millones hasta el mínimo de 72.019 millones alcanzado el 23 de agosto. Dicha baja, de 11,7%, representó un retiro diario de 180,5 millones. La dolarización se incrementó en dos puntos porcentuales alcanzando 66% el 23 de agosto y las tasas llegaron a 24,8% en pesos y a 13,2% en dólares.

Etapa IV: a partir de ese mínimo se observó un comportamiento positivo, impulsado por las imposiciones en dólares, que hasta el 2 de octubre significó una suba de 2.100 millones, la cual equivale a una suba diaria de 52,5 millones. Así, los depósitos totales se ubicaron el 2 de octubre en 74.119 millones, muy por debajo del nivel inicial de 85.754 millones. En el fin de esta etapa la dolarización llegaba a 67,4% del total de depósitos y las tasas se ubicaban en 18,9% para los depósitos en pesos y 11,7% para las colocaciones en dólares.

Etapa V: desde el máximo local de 74.119 observado el 2 de octubre hasta el presente se verifica una reducción de 1.823 millones en 14 días, representando una caída diaria de 46 millones bastante inferior a la de la Etapa III, donde los depósitos decrecían a un ritmo de 180 millones por día a pesar de las altas tasas de interés que ofrecía el sistema. En la actualidad los depósitos se encuentran dolarizados en casi 70% y las tasas promedio llegan a 21% y 12% para pesos y dólares, respectivamente.

• Spread

Así, las tasas pasivas promedio del sistema para los plazos fijos a 30 días en pesos pasaron de 7,2% en febrero, alcanzando un máximo de 37,8% en agosto, ubicándose en la actualidad en valores cercanos a 21%. El spread entre monedas o «riesgo moneda» para estas operaciones pasivas se ubicó en setiembre en un nivel promedio de 905 puntos básicos, el cual implicó una suba de 654 puntos en relación con el promedio de febrero, alcanzando un máximo de 1.143 puntos en julio en coincidencia con el período de máximo drenaje de depósitos.