Un tanto desconectado del grupo de punta se vio al Merval, en la rueda de ayer. Como para decir que si los demás salieron de la grilla de partida, donde se habían quedado clavados el lunes, al índice porteño no le cambió mucho la imagen y perdió terreno en el arranque semanal. A la par que la Reserva Federal daba a conocer sus « minutas», acerca de lo resuelto en la reunión por la rebaja de tasas, un hecho solamente anecdótico fue capaz de darle condimento al día y culminando con avance de buen 0,86% en el Dow Jones, como en indicadores aledaños de su entorno. Y el Bovespa supo servirse bien del plato del día, con 1,42% de aumento. Pero, en Buenos Aires todo quedó más pálido. Con un mínimo en los 2.285 puntos y alcanzando máximo de 2.295 -muy cercanas las puntas, nuevamente-el final resultó un híbrido de ambas cifras, con 2.291 unidades que solamente marcaron 0,22% en porcentual de alza.
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Una rueda que resultó nítida afuera, pero difusa en lo doméstico, al tiempo que el ambiente parece volver a apostar por versiones del tipo Acindar, respecto de movimientos en ciertos papeles. No mucho más que eso, muy poco.
El total negociado se situó en los $ 76 millones de efectivo, sin poder recobrar la altura que había ganado en semana previa. Franja de casi 10% sobre los totales. Las «cauciones» en $ 110 millones, sin mucho vuelo tampoco, coronaron una sesión donde la Bolsa local pareció no poder impregnarse de un ambiente más entonado, que se vivió en otros recintos.
Acaso la cierta atmósfera preelectoral, que anticipa el evento que está a la vista, pueda tener algo que ver (y en tren de hallarle alguna excusa). La petrolera brasileña encabezó los aumentos, con 5,8%, seguida por Celulosa y su buen nivel de 5,3%, por allí también apareció Ledesma con más de 4 por ciento. G. Galicia y Tenaris casi en blanco, con caída en Pampa Holding -de 1%- detuvieron al promedio. Y la Bolsa, estuvo poco.
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