Contrariamente a lo que opina el sector privado, y a la prudencia con la que se manejó el gobierno sobre el efecto que tendrá sobre el país la enfermedad de la «vaca loca» confirmada en Estados Unidos, el responsable de Relaciones Internacionales del SENASA, Rodolfo Aserbi, sostuvo ayer que « seguramente el país aumentará su volumen de carne a los países que ya proveía, y además entraría en algunos países del sudeste asiático, que históricamente compraban en Australia o Estados Unidos».
El contenido al que quiere acceder es exclusivo para suscriptores.
«Es probable que la Argentina se abra a otros mercados porque varias filiales de América de la casa de comidas rápidas McDonald's ya comenzaron a pedir que el país sea proveedor inmediato de carnes», expresó Aserbi, quien comentó que países del norte de Africa que compraban hígado en los Estados Unidos estarían dispuestos a adquirirlo en la Argentina.
Y explicó que la situación estadounidense abre también posibilidades para los estados de América del Sur: «No nos olvidemos que Brasil está muy bien posicionado en el mercado internacional».
El funcionario no desestimó la posibilidad de que «las administraciones veterinarias de varios países compradores de carne van a meditar sobre la actitud a seguir con la Argentina».
Dejá tu comentario