Sigue diluyéndose el poder de Alan

Otra de esas ruedas que no fue fácil, aunque esta vez el saldo terminó siendo positivo. Por "un pelo", pero positivo al fin. Antes de la apertura la perspectiva de mayores ganancias en Procter & Gamble entonó el animo de los inversores y las blue chips arrancaron en positivo. Si bien puede quedar la idea entre los más desprevenidos que el anuncio de la Fed tuvo un efecto significativo sobre el mercado, lo cierto es que fue el adelanto que se habría aprobado la unión de Hewlett Packard con Compaq, lo que dio un duro golpe al mercado y lo que hasta ese entonces era una suba de 0,95 para el Dow (y un más acotado 0,8% para el NASDAQ) se redujo de manera significativa, pasando en el caso de las acciones tecnológicas a convertirse en una pérdida de 0,2%. En la última hora el mercado se recuperó levemente y para cuando sonaba la campana de cierre el promedio industrial estaba en 10.635,25 puntos, mostrando una mejora de 0,54%, en tanto que el NASDAQ subía 0,2%. Después de haberse "ido de boca" en las dos últimas oportunidades en que habló públicamente sobre el futuro de la economía, Alan Greenspan volvió a su acostumbrada parquedad, sometiéndose en un todo a lo que el mercado pretendía. Tal vez demasiado porque los índices accionarios realmente no registraron la difusión de la minuta del organismo como noticia. Distinto fue el caso para los bonos del Tesoro, pero las variaciones fueron prácticamente insignificantes ya que la tasa a 10 años retrocedió a 5,285%. De aquí a mayo, poco parece que va a importar lo que digan Greenspan y sus amigos, a menos que la economía no muestre los avances que están pregonando. Un tema (ya casi grave), el bajo volumen operado.