Londres (ANSA) - El primer ministro británico, Gordon Brown, declaró ayer que está «determinado» a conducir a Gran Bretaña durante la actual crisis económica en el país.
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Brown, que habló a la cadena inglesa BBC durante la Cumbre del G-8 en Japón, admitió que el Reino Unido «está atravesando tiempos muy difíciles».
Sin embargo, insistió en que el país está «mejor posicionado» que otros para sobrellevar los problemas causados por el aumento de los precios de alimentos y el combustible, y por la crisis crediticia internacional.
Poco antes, la Cámara del Comercio británica advirtió que existe un «serio riesgo» de que Gran Bretaña entre en una recesión. «Creo que la economía británica está en una mejor posición que otras, así que lideraré a nuestra economía durante estos tiempos difíciles», declaró Brown desde Japón. «Si hubiera pensado que no era la persona adecuada, no me habría presentado como mandatario. El examen del liderazgo es dirigir durante épocas difíciles», agregó.
Según el primer ministro británico, «cada país en el mundo enfrenta tiempos de dificultad económica debido a los precios del combustible y de los alimentos».
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