L-Gante, más complicado: encontraron un celular robado entre sus pertenencias

El cantante de cumbia se encuentra detenido desde principios de junio, cuando fue inculpado por amenazar a un empleado municipal.

Elián Ángel Valenzuela​, más conocido como L-Gante.

L-Gante, el cantante y compositor de cumbia, se encuentra detenido desde el martes 6 de junio por privar de la libertad y amenazar a dos empleados municipales en un incidente a la salida de un boliche. Al ser detenido, los efectivos policiales allanaron su casa del Country Banco Provincia de Francisco Álvarez.

Cuando ingresaron a la casa, secuestraron distintos elementos, como armas réplicas, ropa y marihuana. Entre los diversos objetos se encontraron cinco teléfonos, que los especialistas se llevaron para peritar. Dos pertenecían a las mujeres que lo acompañaban ese día y los restantes eran propios.

Las investigaciones determinaron que de uno de los dispositivos se había realizado la amenaza que luego terminaría en la privación ilegítima de la libertad que aún lo mantiene preso; y el otro era robado.

L- Gante está detenido desde el martes 6 de junio.

Esta ampliación de imputación, complica aún más la situación del cantante. El fin de semana pasado, el juez Gabriel Castro le dictó la prisión preventiva, acusado de los delitos de amenazas simples en concurso real con privación ilegítima de la libertad en concurso ideal con amenazas coactivas.

Además, el juez aseguró que aun hoy persisten riesgos procesales como el entorpecimiento de la causa y el no apego al proceso por parte de L-Gante.

Cómo fue la detención del cantante

El exponente de la cumbia 420 y sus amigos salían de bailar de un boliche de General Rodríguez, cuando tuvieron un altercado con otro grupo, entre los que había un empleado municipal vecino del barrio.

En ese momento, la Guardia Urbana de Protección Ciudadana del Municipio demoró a los involucrados y L-Gante amenazó al empleado municipal, le apuntó con una pistola, lo obligó a subir a su auto y se lo llevó, según afirmaron testigos. Pocas cuadras después encontró a la segunda víctima y también lo subió a su auto.

Cuando se enteró de que sus amigos habían sido sólo identificados y no detenidos, dejó descender de su vehículo a las personas que retenía.