Un abogado y ex policía federal fue asesinado de un balazo en el cuello al tirotearse con uno de los dos delincuentes que ingresaron a robar a su casa del partido de Lomas de Zamora luego de reducir a sus dos hijos y a la novia de uno de ellos. Se investiga si los asaltantes, que actuaron con un tercer cómplice, habían robado horas antes el automóvil utilizado en el hecho y si uno de los ladrones alcanzó a ser baleado por el hombre asesinado.
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El hecho ocurrió en una vivienda ubicada en Buen Orden al 200, en la localidad de Villa Galicia, de Lomas de Zamora, donde la víctima, identificada por la Policía como Héctor Ramón Martínez, de 50 años, residía junto a su familia. Todo se inició a la madrugada, cuando uno de los hijos de Martínez, acompañado por su novia, fue a buscar a su hermano menor a una fiesta en una camioneta Grand Cherokee.
Minutos después, los tres jóvenes regresaron a su casa, un chalet de dos plantas con un portón de rejas al frente, y guardaron el vehículo del abogado, ex inspector de la Policía Federal. Cuando cerraban el portón de ingreso principal fueron abordados por tres delincuentes armados que se movilizaban en un automóvil Volkswagen Gol, dijeron los informantes.
Una vez en el interior de la casa, los delincuentes encerraron al hijo mayor de Martínez y a su novia en el baño de la planta baja, en tanto que el otro tomó al más joven de los hermanos y lo condujo hacia la planta alta. Martínez dormía junto a su esposa en una de las habitaciones del primer piso y al escuchar los ruidos, tomó su pistola 9 milímetros. En los escalones se encontró con el delincuente armado que llevaba a su hijo menor como «escudo humano», por lo que trató de resistirse al asalto. «La víctima alcanzó a efectuar un disparo que, al parecer, hirió al asaltante, pero recibió un balazo en el cuello a la altura de la nuca», explicó la fuente policial.
Tras la agresión, los delincuentes escaparon del lugar con objetos personales de los tres jóvenes, entre ellos, un teléfono celular, mientras que Martínez quedó gravemente herido. Los familiares llamaron a una ambulancia y a la Policía, pero cuando los efectivos de la seccional de Villa Galicia y los médicos arribaron al lugar del hecho Martínez ya estaba muerto.
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