No declaró acusado de matar a su ex y dejarla con su beba en una alcantarilla

Familiares y amigos de la víctima marcharon por la capital de Córdoba.

El único acusado del asesinato de Paola Acosta e intento de homicidio de su hija Martina, de un año y nueve meses, ambas encontradas dentro de un desagüe en la capital cordobesa, se negó a prestar declaración ante la fiscal de la causa.

Se trata de Gonzalo Lizarralde, quien se abstuvo de declarar ante la fiscal Eve Flores por consejo de su abogado defensor, Sebastián Macari Gaido.

El hombre está acusado de homicidio calificado y tentativa de homicidio agravado por el vínculo y se encuentra detenido en el penal de Bouwer de Córdoba.

En tanto, Martina, quien sobrevivió alrededor de 80 horas dentro de un desagüe del barrio Alto Alberdi junto al cadáver de su madre asesinada, continúa su recuperación en el Hospital de Niños de la ciudad de Córdoba y a mediados de esta semana podría ser dada de alta.

Por su parte, Marina Acosta, hermana de Paola y tía de Martina, contó este lunes vía Twitter que recibió cartas de chicos donde expresan deseos para que su sobrina se recupere.

"Tengo una colección de cartas de nenes y nenas chiquitos diciéndole a Martina que se recupere y que la quieren. Ternura en su punto máximo", escribió en su cuenta de Twitter.

Por otro lado, fue convocada una movilización bajo el nombre de "marcha de las antorchas" por las calles de la ciudad para reclamar por justicia por Paola y Martina.

El pasado 21 de septiembre, Martina fue encontrada junto a su madre, Paola Acosta, de 36 años, quien fue hallada muerta, en un desagüe en la esquina de Igualdad y Zípoli en barrio Alto Alberdi.

Ambas habían desaparecido cuando debían encontrarse con Lizarralde, quien tenía que abonar a Paola la primera cuota alimentaria dispuesta por una orden de la Justicia provincial.

El hombre había reconocido a la niña recién el 20 de agosto pasado, luego de solicitar un análisis judicial de ADN, según revelaron fuentes judiciales.