Decenas de palestinos resultaron heridos y otros fueron detenidos en enfrentamientos con la policía israelí durante el lunes a la noche en Jerusalén Este ocupada, en el marco del funeral de un palestino herido en la Explanada de las Mezquitas, según fuentes palestinas.
Jerusalén: escala la tensión tras nuevos choques con la policía israelí durante un funeral
Los oficiales lanzaron balas de goma y gases lacrimógenos a cientos de palestinos, que arrojaron piedras, durante las exequias de un joven que murió por heridas sufridas tres semanas atrás.
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Cientos de personas participaron en el funeral de Walid Al Sharif, de 23 años, que murió el sábado a causa de las heridas que había sufrido tres semanas antes en enfrentamientos con la policía israelí en Al Aqsa, tercer lugar sagrado del islam y el sitio más sagrado del judaísmo, llamado Monte del Templo.
Sus restos fueron transportados por primera vez el lunes por la noche a través de la explanada, donde se enarbolaron banderas palestinas, y luego a un cementerio en las afueras de la Ciudad Vieja, situada en Jerusalén Este, sector palestino ocupado y anexado por Israel, observó a un periodista de la AFP.
Durante los enfrentamientos con la policía israelí en medio de la procesión, 71 personas resultaron heridas por balas de goma y granadas de percusión, según la Media Luna Roja palestina.
Trece personas fueron hospitalizadas.
Por su parte, la policía israelí informó de 15 detenciones durante "violentos disturbios" iniciados por centenares de personas "que arrojaron piedras, botellas, ladrillos y otros objetos pesados" a las fuerzas de seguridad israelíes.
Seis policías resultaron heridos en los enfrentamientos, según la policía en su comunicado.
Más de 50 palestinos de Jerusalén fueron detenidos, afirmó el club de presos palestinos, organización de defensa de los detenidos encarcelados por Israel.
Estos nuevos enfrentamientos se producen en un contexto de violencia constante en los territorios palestinos y en Israel.
El viernes la policía israelí irrumpió en las exequias de la periodista palestina-estadounidense Shireen Abu Akleh, la corresponsal de Al Jazeera asesinada durante una operación del ejército israelí en Cisjordania ocupada.
Los oficiales reprimieron a los dolientes e incluso golpearon a quienes cargaban el féretro, que casi cae al suelo.
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