Washington (EFE, AFP, Reuters) - El Comité de Relaciones Exteriores de la Cámara de Representantes de Estados Unidos aprobó ayer una resolución que califica como genocidio la masacre de armenios a manos de soldados turcos en 1915, desafiando un pedido del presidente George W. Bush y en medio de las crecientes amenazas de Turquía de invadir el norte de Irak para combatir a los separatistas kurdos.
El contenido al que quiere acceder es exclusivo para suscriptores.
La medida fue aprobada por 27 votos a favor y 21 en contra y la misma pasará ahora al pleno de la Cámara de Representantes. El texto dice que la masacre de armenios durante la Primera Guerra Mundial (1914-1918) fue un «genocidio» que debe ser totalmente reconocido en la política exterior de EE.UU.
Los armenios aseguran que 1,5 millón de personas murieron por asesinatos bajo el Imperio Otomano, pero Turquía asegura que sólo entre 250.000 y 500.000 armenios perdieron la vida dentro de lo que califican como una «guerra civil».
Antes de su votación Bush, había instado a los legisladores a que rechazaran la resolución, ya que haría «gran daño» a las relaciones entre Washington y Ankara. En declaraciones realizadas ayer desde la Casa Blanca, Bush subrayó que la condena «no es la respuesta correcta a estas matanzas masivas históricas».
En este mismo sentido, la secretaria de Estado, Condoleezza Rice, había subrayado que la aprobación de la resolución «sería muy problemática» para las guerras que libra EE.UU. en Asia. «Sería desestabilizador para nuestros esfuerzos en Irak y Afganistán porque Turquía, como aliado estratégico importante, es crítico a la hora de apoyar nuestros esfuerzos en esas áreas cruciales», agregó Rice en declaraciones también desde la Casa Blanca. La resolución sobre Armenia llegó en un momento delicado de las relaciones entre ambos países. El primer ministro turco, Tayyip Erdogan, confirmó ayer que su gobierno está diseñando planes para autorizar una incursión transfronteriza al norte de Irak para atacar a los rebeldes kurdos. Sin embargo, Washington ha instado a Turquía a que no envíe tropas allí por temor a la desestabilización de una de las pocas regiones del país árabe que está bajo control.
Sin validez
En una primera reacción, el presidente turco Abdullah Güll dijo que «esta inaceptable decisión del Comité no tiene validez ni respetabilidad para el pueblo turco». «Desafortunadamente, algunos políticos norteamericanos no se atuvieron al buen sentido y prefirieron sacrificar grandes cuestiones a pequeños problemas de política interna», afirmó el mandatario.
Por su parte, el embajador de Ankara en Washington, Nabi Sensoy, aseveró que el texto es «decepcionante», al tiempo que instó a la presidenta de la Cámara de Representantes, la demócrata Nancy Pelosi, abstenerse de someterlo a votación.
Los legisladores que votaron el texto aseguraron que el tema no podía ser ignorado, a pesar de las advertencias contra la resolución emitidas por Bush y Rice. «Los amigos no dejan que sus amigos cometan crímenes contra la humanidad», dijo el representante republicano de Nueva Jersey Christopher Smith.
En la misma línea, el demócrata Gary Ackerman añadió que «nos dijeron que el tiempo no era el correcto. Pero el tiempo no fue correcto para los armenios en 1915».
Dejá tu comentario