27 de abril 2020 - 18:31

Industria maderera en la peor crisis de los últimos 50 años: las ventas caen más del 70%

Un relevamiento de la cámara que agrupa a los distintos eslabones productivos muestra que el 60% de los empresarios aún no pudo acceder a las líneas de crédito al 24%. Peligra pago de salarios y crece número de cheques rechazados.

La industria forestal enfrenta una de las peores crisis de los últimos 50 años.

La industria forestal enfrenta una de las peores crisis de los últimos 50 años.

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Otro de los sectores muy castigados por la parálisis de la cuarentena por el coronavirus es el maderero, con epicentro en las provincias de NEA y NOA, cuyas ventas se desplomaron en más del 70% en el último mes, según un relevamiento realizado por la cámara que agrupa a los empresarios de ese rubro. Además, el mismo informe plantea las dificultades de los aserraderos y rubros vinculados con la actividad para acceder a las líneas de financiamiento anunciadas para oxigenar a las economías en crisis, y el aumento de cheques rechazados durante abril.

El sector madera y muebles está integrado por Pymes en un 98,7% y genera 110.000 puestos de trabajo, entre directos e indirectos.

“A la imposibilidad de vender en locales comerciales, la falta de obra pública-privada o el acceso a obra terminada para equipamiento se le suma una altísima demora de los bancos en otorgar créditos o aplicar la normativa vigente que ponen al sector en una situación preocupante", graficó Pedro Reyna, Presidente de la Federación Argentina de la Industria Maderera y Afines (FAIMA).

El relevamiento se realizó sobre 330 empresas del sector foresto industrial distribuidas en casi todo el país, y el 68% planteó que tendrá problemas para hacer frente a los salarios de abril o podrá hacerlo al 50%, mientras que el 90% confirmó haberse inscripto en el programa de asistencia al trabajo y a la producción dispuesto a través del decreto 332 del Gobierno nacional.

Pero para el 60% de los encuestados, sin embargo, ese mecanismo de ayuda mediante créditos bancarios "se dilata y obliga a las empresas del sector de la madera y el mueble a descapitalizarse para hacer frente a los compromisos". "La mayoría de ellas no podrá recurrir nuevamente fondos propios en los próximos meses dejando a las PyMES en una situación de alta fragilidad financiera", subrayan desde FAIMA.

Entre los motivos para la falta de acceso al crédito se destacan la falta de información por parte de las entidades sobre todo lejos de los principales centros urbanos, la exigencia de la nómina completa de empleados en esa entidad y el pedido de mayores garantías desconociendo el FoGAR.

"Probablemente estemos atravesando el peor momento de la industria de la madera y mueble de los últimos 50 años", expresó Román Queiroz, secretario General de FAIMA.

A pesar de que el sector fue considerado esencial en algunos eslabones de la cadena, el impacto del cierre de locales comerciales a la calle y el freno a la obra pública-privada pusieron al sector en una situación extremadamente delicada.

“El impacto de la caída en las ventas del sector es alarmante. Las empresas se descapitalizaron para enfrentar compromisos y hoy se encuentran en una situación de altísima fragilidad financiera”, remarcó Gonzalo Rondinone, director Ejecutivo de la entidad que aglutina a 28 cámaras y productores de los distintos eslabones de la cadena maderera.

Entre los sectores alcanzados por este dramático escenario se encuentran, por ejemplo, productores de envases y pallets, pisos y revestimientos, molduras, aserraderos, carpintería en general, fabricantes de aberturas, maderas y piezas para la construcción, láminas, chapas, maderas compensadas, tableros de partículas y de fibras, pellets de madera, viviendas industrializadas, muebles y demás manufacturas de madera.

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