15 de julio 2024 - 15:05

"Compra cuando haya sangre en las calles".... y sangre tuvimos

El atentado contra Donald Trump abre una oportunidad de ganancia para aquellos que se atrevan a invertir.

El atentado le abrió a Donald Trump una puerta más grande hacia la presidencia y una oportunidad para los inversores que se atrevan y sepan cómo aprovecharlo

El atentado le abrió a Donald Trump una puerta más grande hacia la presidencia y una oportunidad para los inversores que se atrevan y sepan cómo aprovecharlo

Dicen que el Barón Nathan Rothschild, luego de la batalla de Warteloo (1815) afirmó “El momento de comprar (títulos) es cuando hay sangre en las calles...”. No hay ninguna prueba de que fuera él, pero estas palabras se han convertido en unas de las máximas favoritas del mercado, especialmente para los “inversores contrarios”.

Nathan_Rothschild.jpg

"El momento de comprar es cuando hay sangre en las calles, aunque...", Nathan Rothschild, después de la Batalla de Waterloo, 1815

Ejemplos tenemos muchos, el alzamiento de la plaza Tianmen en China, durante 1989 desplomó las acciones en Hong Kong, pero fue uno de los disparadores de las reformas de Deng Xiaoping que convirtió a China en la potencia que es hoy.

En agosto de 2014, un policía mató de un tiro a un joven negro en Ferguson, Missouri. Esto disparó una serie de revueltas muy violentas, que horrorizaron a la clase media yanqui, abriendo la puerta para que Trump se hiciera de la presidencia en 2016 .

Algo similar había ocurrido durante los alzamientos de 1968 que ayudaron a que Richard Nixon se hiciera con la presidencia, al llamado de “Ley y orden”.

Claro que también tenemos muchos ejemplos en contrario...

Las guerras y el mercado

Si vemos algunos de los principales eventos geopolíticos de los últimos 84 años, ha habido de todo, pero a grandes rasgos no parecen haber condicionado el resultado del mercado accionario norteamericano.

Eventos geopoliticos y el mercado.JPG
Si bien siempre existen las oportunidades, el mercado bursátil no suele reaccionar de la mejor manera a los eventos geopolíticos, y en particular a las guerras.

Si bien siempre existen las oportunidades, el mercado bursátil no suele reaccionar de la mejor manera a los eventos geopolíticos, y en particular a las guerras.

En todo caso -y forzados- podríamos decir que, a mediano y largo plazo, no han impulsado al S&P500, que a tres meses y un año presenta resultados inferiores a los de su promedio histórico.

Así que tal vez, en caso de guerra, convendría no darle mucha “bolilla” a la máxima bursátil.

Asesinatos y atentados vs. el Dow

Hechos como el atentado de este sábado en contra de Donald Trump, EE.UU. cuenta con más de uno.

Cuatro presidentes asesinados durante su función (Abraham Lincoln, 1865; James Garfield, 1881, William McKinley, 1901 y John F. Kennedy, 1963), cinco intentos frustrados (Franklin D. Roosevelt, 1933; Harry S. Truman, 1950; Gerald Ford, dos en 1975; Ronald Regan, 1981; George Bush en 2005 -esto fuera de los EE.UU.-), el asesinato de un candidato presidencial (Robert F. Kennedy, 1968), la invalidez de otro (George Wallance, 1972) y un atentado frustrado (Theodore Roosevelt 1912) que ahora son dos.

Asesinatos y atenbtadosJPG.JPG
EE.UU. tiene -lamentablemente, una larga historia de atentados y asesinatos a los presidentes y candidatos, así que no sorprenden y el mercado sabe como reaccionar

EE.UU. tiene -lamentablemente, una larga historia de atentados y asesinatos a los presidentes y candidatos, así que no sorprenden y el mercado sabe como reaccionar

Once actos de violencia en contra de los presidentes o aspirantes a la presidencia desde el arranque del siglo XX (trece a lo largo de sus historia), lo que significa que si bien no se trata de eventos habituales tampoco son una sorpresa para el mercado financiero.

Nuevamente podemos decir que ha habido de todo, pero aquí la reacción de corto plazo pareciera haber sido negativa, al contrario de lo que habría ocurrido con la de largo.

Trump, encuestas y apuestas

Prácticamente no hubo nadie que no aseverara este fin de semana que luego de los disparos y el asesinato de un inocente -que solo quiso proteger a su familia-, las chances de Donald Trump de hacerse de la presidencia de los Estados Unidos en noviembre dejaron de serlo.

Dejaron de serlo para convertirse en una cuasi certidumbre. ¿Argumentos?: el desmadre del partido Demócrata, la soledad de Joe Biden, el impulso a los militantes Republicanos, toda una nueva línea argumental sobre la seguridad, Dios, conspiraciones varias y la capacidad casi heroica del candidato.

Aún faltan unos días para que las encuestas, que venían dando a Trump ganador en la preferencia popular por arriba de los márgenes de error estadístico (en 2020 Biden se alzó con el 51.3% y el rubio con 46.8%) reflejen como impactó lo de Butler en la gente y en particular en los votantes.

Capture.JPG
Los apostadores le asignaron mayores chances de una victoria a Donald Trump tras el atentado. Falta ver que dicen las encuestas.

Los apostadores le asignaron mayores chances de una victoria a Donald Trump tras el atentado. Falta ver que dicen las encuestas.

Un punto aparte merece lo que viene ocurriendo con las apuestas. Luego del debate presidencial del mes pasado, las chances que le asignaban los jugadores a Biden se desplomaron, pero las de Trump no crecieron de manera conmensurable, cosa que si ocurrió con los eventuales terceros candidatos.

Casi en un sentido contrario, el atentado de este fin de semana dio un impulso a quienes veían a Trump ganador, sin que esto golpeara al actual presidente que parecería estaré abrevando de las menores probabilidades en favor de los terceros candidatos.

El “Trump Trade”

Es fácil creer que el atentado refleja mayor inseguridad, mayor inseguridad, mayor malestar social y mayor malestar social mayor inseguridad económica.

Pero las cosas no funcionan de esta manera, al menos no en el mundo real. Lo que el tiroteo hizo, al incrementar las chances de Trump, fue disminuir una porción del riesgo político, que tanto pesa sobre el mercado.

Este lunes los contratos a futuro sobre índice VIX a octubre, que reflejan la volatilidad esperada en los índices de opciones accionarias justo antes de las elecciones, experimentaron una fuerte caída. Esto puede no significar nada o ser algo circunstancial, pero en principio es como que “el índice del miedo” nos esta diciendo que no espera grandes sorpresas para el mercado en torno a los comicios.

Si bien todo es posible con Donald Trump, podríamos suponer que cuando asuma su intención es reducir los impuestos que pagan los norteamericanos, incrementar las tarifas a los productos importados -en especial de la Unión Europea y a China-, y suprimiendo las regulaciones que impuso la administración Biden, cerrando y reduciendo una parte de la administración nacional y eliminando una serie de gastos, como seria el apoyo militar a Ucrania.

Una victoria contundente, en especial si los republicanos retienen la cámara baja y recuperan la alta, reduciría el riesgo norteamericano, convirtiendo al país en una aspiradora de fondos (lo que no es bueno para países como el nuestro).

Teóricamente esto debiera beneficiar al dólar y debilitar a los bonos del tesoro, induciendo un incremento de la tasa de interés, lo que a su vez repercutiría sobre una menor inflación y mayor consumo.

Para el inversor internacional entonces la apuesta debiera ser por el fortalecimiento del dólar, la suba de la tasa yanqui y una caída en el precio de los commodities.

Para el inversor local, la apuesta debiera apuntar a las empresas de energía, salud, tarjetas de crédito y bancos, aquellas vinculadas a las criptomonedas, etc., con las de energías renovables, tecnológicas, etc, en un sentido contrario.

Este lunes, el mercado se viene comportando casi como si Trump ya hubiese asumido. Las acciones de las empresas directamente vinculadas al candidato tenían una jornada brillante: Trump Media & Technology Group saltó 48.89%, Phunware 39.6% y Rumble 10.9%; y aquellas “afines” como el operador de prisiones GEO Group ganaba 8.1% o Smith & Wesson 4.1%, mientras el Bitcoin, que había saltado a más de u$d 60,000 al conocerse el atentado -Trump es un “fan” de las criptomonedas- operaba por encima de los u$d 63,300. Ah!, y no nos olvidemos de las acciones de Tesla que gana casi 50% en un mes y trepaban mas de 4%.

En un sentido contrario, el petróleo caía 0.4%, la soja 2.1%, el cobre 1.8%, la tasa a 10 años trepaba 1.3% a 4.23%, el euro, la libra y el yen cedían frente al dólar mientras las acciones europeas, Nvidia, Amazon, Microsft y Meta, perdían terreno frente a un Dow y un S&P500 que marcaban nuevos máximos históricos.

Sinceramente da ganas de pensar que ya todas las cartas están echadas, y que este es el escenario que nos espera. El problema es que aún faltan casi cuatro meses hasta noviembre y como con Trump, cualquier cosa puede pasar. No olvide que el adagio termina, “cuando hay sangre en las calles… aunque esa sangre sea la tuya”

Dejá tu comentario

Te puede interesar