Estos son los autos que inspiraron a Elon Musk a fundar Tesla

El magnate tiene un atractivo por los vehículos exóticos y muchos de ellos lo llevaron crear una de las compañías de autos mas grandes de la actualidad.

La colección de vehiculos de Elon Musk que lo llevaron a fundar Tesla. 

Grok IA

Elon Musk, empresario y magnate fundador de varias compañías, es conocido por ser un entusiasta de los autos y debido a su fortuna los que posee no son comunes. Su gusto por los “fierros” lo llevaron a fundar su marca de vehículos eléctricos Tesla.

Varios conocedores del rubro celebran la colección privada de Musk que tiene piezas excéntricas. Algunos son de película y otros superdeportivos, aunque hay también uno que destruyó. Este garaje sudafricano es especial para quien le gustan los coches y para quien no también.

El motivo que llevó a Elon Musk a comprar estos autos y obtener su inspiración

Elon Musk posee una colección de vehículos que demuestra su pasión por la ingeniería automotriz. Aunque el número exacto de unidades en su poder no se conoce con precisión, algunos modelos destacan por su rareza y por los esfuerzos realizados por Musk para incorporarlos a su colección.

Entre las piezas más llamativas se encuentran vehículos que han captado la atención mediática, no sólo por sus características técnicas, sino también por las historias detrás de su adquisición. Estos automóviles reflejan el interés de Musk por la innovación y el diseño vanguardista en el mundo del motor.

La lista de los autos que inspiraron a Elon Musk a crear Tesla

Musk tiene varios coches, entre ellos muchos de su propia compañía, pero estos la llevaron a la realidad:

Lotus Espirit “Wet Nellie”

El Lotus Esprit modelo 1976, conocido como "Wet Nellie", alcanzó fama mundial por su aparición en la película de James Bond "The Spy Who Loved Me" (1977). Este vehículo se convirtió en un símbolo cinematográfico al transformarse en un submarino funcional durante una de las escenas más recordadas de la saga. Elon Musk adquirió este ejemplar único en 2013 a través de la casa de subastas RM Sotheby's en Londres. El magnate pagó US$997.000 para agregar esta pieza de la historia del cine a su colección personal.

Mclaren F1

El McLaren F1 de 1997, diseñado por Gordon Murray, ostentó durante años el título de automóvil de producción más rápido del mundo. Con una velocidad máxima superior a 370 km/h y un motor V12 de BMW, este superdeportivo representaba la cúspide de la ingeniería automotriz de su época.

En 1999, tras la venta de su empresa Zip2, Elon Musk adquirió uno de estos exclusivos vehículos por US$1 millón como celebración de su primer gran éxito empresarial. Sin embargo, en el año 2000, Musk sufrió un accidente al volante de este McLaren mientras conducía con Peter Thiel, cofundador de PayPal. Aunque ambos resultaron ilesos, el automóvil quedó gravemente dañado.

Jaguar E-Type Roadster

Desde su infancia, Elon Musk albergó el sueño de poseer un Jaguar E-Type, un automóvil que muchos expertos consideran como uno de los diseños más bellos de la historia automotriz. Este sueño se materializó en los años 90, cuando Musk adquirió un ejemplar clásico equipado con un motor de 4,2 litros y 265 caballos de fuerza.

El modelo en cuestión, diseñado originalmente por Malcolm Sayer -una figura legendaria en el campo de la aerodinámica automotriz-, ocupa un lugar especial en la colección de Musk. Aunque actualmente no se encuentra en condiciones operativas, el magnate lo conserva como un valioso recuerdo.

Porsche 911 Turbo

Uno de los vehículos más significativos en la colección de Elon Musk es el Porsche 911 Turbo, adquirido en 2012. Este automóvil ocupó un lugar especial en el desarrollo de la visión empresarial de Musk, quien lo identificó como inspiración para la creación de Tesla.

Según reveló el propio Musk en una entrevista con el perfil de Instagram Porsche 911 Carrera Daily, la adquisición de este vehículo deportivo respondió a su interés por explorar las posibilidades de electrificación en automóviles de alto rendimiento. Aunque intentó desarrollar una versión eléctrica del modelo con ayuda de ingenieros especializados, el proyecto no llegó a concretarse.

Más allá de su valor como vehículo de colección, este Porsche 911 Turbo representa un hito simbólico en la trayectoria de Musk. Fue este automóvil el que desencadenó el proceso de reflexión que eventualmente condujo al desarrollo de los vehículos eléctricos de alto rendimiento que caracterizan a Tesla en la actualidad.

Ford Model T

Mientras que su colección incluye superdeportivos y prototipos futuristas, Elon Musk también posee un Ford Model T, un homenaje a los cimientos de la industria automotriz. Este icónico modelo, lanzado por Henry Ford en 1908, marcó un hito al convertirse en el primer automóvil producido en serie, democratizando el acceso al transporte personal.

La unidad en posesión de Musk corresponde a un ejemplar restaurado de los años 1920. Aunque no forma parte de los vehículos que utiliza regularmente, el magnate lo conserva como pieza histórica. Según informó la revista especializada Express Vehicle Contracts, este modelo representa para Musk un recordatorio tangible del poder transformador de la innovación humana en la industria automotriz.