Alberto Fernández y el espíritu del Grupo Callao

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Días después de la dura derrota electoral del 2017 a manos del macrismo, cuando todavía dolían sus efectos y todo hacía prever un futuro aun más incierto para nuestra Argentina, quienes integramos el Grupo Callao fuimos recibiendo uno a uno la invitación de Alberto Fernández -con sorpresa y orgullo- a formar parte del nuevo espacio. Nos convocaba con un entusiasmo admirable para quien ya había sido casi todo en la política argentina.

Desde el comienzo cuando nos encontrábamos en el bar de Callao y Lavalle o en su estudio jurídico, Alberto nos planteó claramente lo que pretendía. Intentó inculcar la mística del célebre Grupo Calafate repitiendo una y otra vez anécdotas de la experiencia que había terminado con Néstor Kirchner en la presidencia, algo que significaba un extraordinario inflador motivacional.

Con una generosidad pocas veces vista en la dirigencia política se puso al servicio de todos nosotros y al mismo tiempo nos motivó a trabajar sobre algunos puntos que consideraba indispensable para revertir aquel escenario político. Así el Grupo Callao conformado por dirigentes -algunos más jóvenes que otros- pero que habíamos pasado por la gestión en distintas áreas o participado en elecciones nació con objetivos muy claros:

  • Comenzar a trabajar una opción para ganarle a Macri, que por aquellos tiempos parecía imposible pero era el momento de iniciar ese camino.
  • Promover un mensaje y acciones concretas en torno a la unidad. La división del campo popular, consecuencia de desencuentros, había sido el principal motivo de las derrotas de 2013, 2015 y 2017.
  • Trabajar la renovación como condición fundamental para pensar un nuevo gobierno de matriz nacional. Renovar es amalgamar experiencia con la fuerza disruptiva de los nuevos cuadros, nos decía Alberto.
  • Fomentar la capacidad para dialogar como principal herramienta para gobernar y terminar definitivamente con la grieta que genera tantos odios y hace tan mal a nuestra Argentina.
  • Construir el futuro. Frente a la tentación de querer restaurar o volver, como consecuencia de muchos buenos recuerdos de los años del pasado gobierno, nos planteamos el desafío de mirar al futuro.

Con ese espíritu muchos trabajamos este año y medio, desde diferentes lugares pero plenamente conocedores de ese mandato. Somos apenas 13 integrantes y cuando lo consultábamos a Alberto por ampliar su conformación, el insistía con invitar a nuestras actividades a muchos compañeros y compañeras, pero los “Callao” eran los iniciales. Una forma de consolidar identidad y mantener la esencia, sostenía.

Al mismo tiempo Alberto, Felipe Solá y alguno más fueron tejiendo la unidad a través de toda Argentina. La decisión de Cristina y el destino lo ponen en un lugar que -nos consta-, no fue buscado. Dicen que en política prima la mezquindad, porque la generosidad “no paga”. No es este el caso. Alberto es hoy el candidato que cumple los requisitos para sacar la Argentina adelante. Desde el Grupo Callao lo celebramos pero al mismo tiempo ya nos ponemos a trabajar. El primer desafío es ganar y después gobernar, tal como ocurrió con aquella historia del Grupo Calafate. Esta vez con la convicción de quienes lo integramos que Alberto Fernández y el espíritu del Grupo Callao son lo mismo.

(*) Miembro del Grupo Callao-Dirigente PJ.

El Grupo Callao lo integran Santiago Cafiero, Guillermo Justo Chaves, Cecilia Todesca Bocco, Matías Kulfas, Miguel Cuberos, Natalia De Sio, Federico Martelli, Victoria Tolosa Paz, Fernando Peirano, Cecilia Gomez Mirada, Anibal Pitelli y Camila García.

• IDEARIO GRUPO CALLAO

Creemos en la construcción colectiva e integradora de todos los sectores sociales; franjas etarias, género, ramas políticas y sindicales, organizaciones sociales y empresariado nacional.

Confiamos en la vigencia del peronismo como la expresión fiel de un movimiento nacional, popular, social y federal, que está llamado a reorganizar la esperanza.

Estamos convencidos que es preciso renovar la dirigencia sin prescindir de aquellos que acumulan experiencia en la gestión de la cosa pública. Renovar es amalgamar la experiencia con la fuerza disruptiva de los más jóvenes. Renovar no es restaurar el pasado Se trata de construir el futuro.

Porque creemos que la gestión de la cosa pública puede prescindir de políticas de que sólo profundizan la desigualdad.

Porque pensamos que ampliando la clase media hacemos de nuestra Argentina un país más grande y justo.

Porque sabemos que a la inflación no se la somete deteriorando el consumo o “secando de dinero la plaza” con un festival de bonos del Banco Central.

Porque apostamos a una economía basada en la producción, en condiciones de acortar la brecha tecnológica y que pueda integrarse a un mundo cada vez más complejo, de pie y en defensa de los derechos esenciales de sus habitantes.

Porque consideramos que el Estado tiene un rol indelegable a fin de garantizar derechos esenciales para una vida digna: educación, salud y seguridad y en el acceso a los servicios públicos.

Porque sabemos que los ciclos de endeudamiento en los mercados internacionales han resultado siempre un buen negocio para pocos y un muy mal negocio para la mayoría.

Porque ya vivimos lo que ello representa y por eso nos duele y preocupa la predominancia de la lógica financiera por sobre la del mundo de la producción y el trabajo.

Porque previo a formar parte del G 20 o de la OCDE debemos reconocernos como integrantes y protagonistas de la patria sudamericana.

Porque no podemos integrarnos a un mundo en el que las economías industriales más poderosas defienden con uñas y dientes su producción y su trabajo mientras nosotros avanzamos en acuerdos de libre comercio asimétricos que tendrán un impacto negativo para la producción y el empleo de los argentinos.

Porque el dinero de la corrupción siempre es malo, tanto cuando circula en bolsos como cuando se oculta en empresas offshore radicadas en paraísos fiscales.

Porque queremos tribunales al servicio de la ley y no de un poder político que los somete a su antojo buscando en sus fallos réditos miserables.

Porque pretendemos superar el pasado de torturados, muertos y desaparecidos con mas verdad y justicia y no con una mayor complacencia para con los condenados.

Porque estamos convencidos de que hay un futuro mejor y que no es posible resignarnos a este presente que profundiza diferencias entre los argentinos y solo convoca al odio de los que mejor la pasan.

Con esas ideas hemos constituido el Grupo Callao.

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