En todo el mundo, la gente ha sido testigo de grandes acontecimientos medioambientales y ha experimentado condiciones meteorológicas extremas, lo que ha llevado el cambio climático al primer plano de la mente de la sociedad.
Desconfianza de los consumidores con respecto a la conciencia ambiental de las empresas
Según un estudio VisualGPS de iStock, la mayoría de los consumidores no confía en las declaraciones de sostenibilidad de las empresas.
-
El 80% de los consumidores está de acuerdo con la ley de etiquetado
-
Inédito fallo por la Justicia ambiental: declaran culpable a ganadero por la matanza de pingüinos en Punta Tombo
Según un informe VisualGPS, el programa de investigación creativa de iStock, la crisis climática ha pasado a encabezar la lista de preocupaciones de las personas en todo el mundo, pero especialmente en Argentina y en la región. Actualmente, el tema se sitúa al mismo nivel que las preocupaciones por la inflación, la crisis energética o incluso las cuestiones relacionadas con la paz mundial.
Hoy en día, 7 de cada 10 personas en todo el mundo creen que han hecho progresos significativos hacia una vida más consciente del medio ambiente, según VisualGPS. En Argentina el porcentaje es similar, pero por ejemplo en Brasil, esta cifra se eleva a 9 de cada 10 individuos. Además, cerca del 85% de los argentinos creen que, a la hora de decidir qué marcas deben usar o comprar, es crucial que la empresa tenga prácticas empresariales sostenibles. Aun así, más de la mitad afirma que es demasiado trabajo investigar lo que las marcas están haciendo activamente para mitigar las amenazas al medio ambiente.
La investigación de iStock muestra también, que con la conciencia ambiental creciendo significativamente en los últimos años, también ha habido un aumento en la desconfianza de los consumidores con respecto a las afirmaciones de prácticas socio-ambientales de las empresas y marcas que dominan el mercado. En su análisis, VisualGPS descubrió que el 85% de los argentinos entrevistados creen que los productos están diseñados para parecer más ecológicos de lo que realmente son. Esa cifra disminuye al 58% si nos fijamos en Japón, por ejemplo.
"Históricamente, en distintos sectores, las campañas publicitarias han promovido la idea de la responsabilidad individual. Estamos acostumbrados a ver imágenes y vídeos que destacan determinadas prácticas sostenibles, desde el reciclaje hasta el uso de la bicicleta o de bolsas de la compra reutilizables. Estos conceptos, en su mayoría impulsados por marcas y políticas públicas, refuerzan la idea de que la sostenibilidad es una responsabilidad individual", afirma la Dra. Rebecca Swift, Directora Global de Creative Insights en iStock.
"Sin embargo, según se desprende de nuestros resultados de VisualGPS, mientras que los individuos creen que el gobierno es el principal responsable de abordar los esfuerzos de sostenibilidad y las preocupaciones ambientales relacionadas con el cambio climático global, la gente cree que las empresas son tan responsables como los individuos, para proteger el planeta y difundir prácticas sostenibles", añade.
Todas las conclusiones indican que las personas de todo el mundo creen que la sostenibilidad es una responsabilidad compartida. Sin embargo, a día de hoy, la investigación muestra que las expectativas de cada sujeto implicado parecen recaer principalmente en los demás, y no en sí mismos.
"A medida que se acelera la crisis climática, los consumidores están cada vez más informados sobre lo que es sostenible, cómo afecta al medio ambiente, quién es responsable y si confían o no en sus afirmaciones *respetuosas con el medio ambiente*. A su vez, las empresas deben procurar elegir mensajes visuales a la altura de las circunstancias", concluye la Dra. Rebecca Swift.
Teniendo en cuenta que 3 de cada 4 consumidores toman decisiones de compra basándose en contenidos visuales, los expertos de iStock comparten algunas ideas sobre cómo las empresas pueden aprovechar estos conocimientos para visualizar de forma más auténtica sus prácticas de sostenibilidad y fomentar la confianza de sus clientes:
Por ejemplo, los contenidos visuales relacionados con el medio ambiente y la sostenibilidad que se basan en clichés de uso habitual, como el oso polar solitario o las manos que sostienen un plantón, suelen ser demasiado abstractos para destacar o resonar en un panorama visual abarrotado.
En su lugar, hay que centrarse en contenidos visuales a gran escala (a menudo respaldados por políticas públicas), como acciones en el ámbito de las infraestructuras, las energías renovables, la agricultura, la conservación del agua o la gestión de espacios verdes; contenidos visuales e iniciativas que rompan las barreras de prácticas que a menudo se consideran "greenwashing"
Dejá tu comentario