20 de mayo 2023 - 00:00

La investigación clínica, otro motor para el crecimiento y desarrollo argentino

En Argentina sólo 62 compañías, de un total de entre 1.500 y 2.000, generan casi la mitad de la inversión global del sector productivo. El camino por delante es largo, pero lleno de oportunidades.

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La medicina de innovación tiene un valor fundamental para pacientes, médicos, el sistema sanitario y la sociedad en su conjunto. Sólo en las últimas décadas, el descubrimiento y desarrollo de nuevas terapias innovadoras ha contribuido a aumentar la calidad y expectativa de vida de las personas en todo el mundo, a ahorrar costos para los sistemas sanitarios e, incluso, a mejorar el progreso social al crear sociedades más saludables y productivas.

En Argentina, el aporte del sector es profundo y relevante al impactar no sólo en la salud de la población sino también y de forma contundente en la economía y el desarrollo de nuestro país. Hoy, la industria de innovación farmacéutica es líder en inversión en Investigación y Desarrollo, superando los $41.000 millones corrientes en 2021, un crecimiento de más del 130% desde 2017.

De acuerdo con la última Encuesta sobre I+D del Sector Empresario Argentino publicada por el Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación, el aporte en investigación clínica representa más del 40% de toda la inversión en Investigación y Desarrollo del país. Esto significa que tan sólo 62 compañías, de un total de entre 1.500 y 2.000 relevadas en el informe, generan casi la mitad de la inversión global del sector productivo. Y en este sentido, no solo Johnson & Johnson es una de las compañías que más invierte en I+D a nivel global sino que Janssen en Argentina pertenecemos al top 10 de compañías con mayor inversión dentro de la industria.

Además, la investigación clínica genera empleo calificado y de calidad y cada día somos más quienes formamos parte de esta industria. El sector se destaca no sólo por el aumento de la demanda de profesionales especializados, que hoy concentra más del 20% de los recursos humanos dedicados a Investigación y Desarrollo en Argentina, sino también por el alto nivel de participación femenina que duplica el promedio del sector empresario en su conjunto.

Y no menos destacable, la promoción de la investigación clínica colabora con el desarrollo de conocimiento, capacidades y habilidades en la industria de la salud. Gracias al esfuerzo local permanente en investigación y desarrollo, los pacientes tienen la posibilidad de acceder de manera temprana a terapias transformacionales, y los profesionales de la salud pueden adoptar prácticas y tecnologías de última generación al mismo tiempo que sus colegas en el resto del mundo.

Sin ir más lejos, hace 3 años cuando la pandemia acechaba, vimos cómo Argentina accedía de forma temprana a vacunas contra el COVID-19 gracias a los laboratorios de innovación que traían estudios clínicos al país. De igual manera sucede con terapias para enfermedades poco frecuentes, medicamentos oncológicos o las últimas innovaciones en terapia génica.

El valor de la innovación farmacéutica es claro y su potencial para el desarrollo económico y productivo argentino prometedor. Estamos seguros de que nuestro país cuenta con la calidad profesional y la capacidad científica para convertirse en un referente en investigación clínica para nuestra región. Por eso, debemos continuar fomentando políticas que la protejan y fomenten.

En el Día de la Investigación Clínica, una fecha que este sábado 20 de mayo conmemora 276 años del primer estudio clínico aleatorizado, quienes formamos parte de la industria farmacéutica de innovación reafirmamos nuestro propósito: promover el acceso a terapias innovadoras para mejorar la vida de los pacientes. Nuestro compromiso es fuerte y a largo a plazo y seguiremos trabajando por más investigación clínica en el país en pos de generar más innovación, más empleo y, por sobre todo, más salud para todos.

Directora de Estudios Clínicos en Janssen Argentina.

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