Llegó "El Ñiño": las lluvias renovaron la esperanza en el agro

Para el sector productivo, este fin de semana ocurrió algo mucho más importante que las elecciones generales. Llovió en varias zonas y hay buenas noticias para la campaña gruesa.

Estamos en proceso de un fenómeno climático Niño en transición, de moderado a fuerte. 

Los últimos Informes del INTA y de la Oficina de Riesgo Agropecuario mostraban en sus pronósticos la posibilidad de lluvias, que finalmente se concretaron con mayor firmeza a partir del domingo y se prevé que continúen durante el inicio de esta semana.

La preocupación por la falta de precipitaciones (en algunas zonas hace casi 4 años que no llueve) no sólo la tienen quienes ya invirtieron una gran cantidad de dinero en la compra de insumos, sino que también la perciben quienes tendrán la responsabilidad de gobernar el país durante los próximos cuatro años.

Hasta el viernes último la foto que mostraban los mapas de reservas hídricas que elaboran la Oficina de Riesgo Agropecuario (ORA) y el Instituto de Clima y Agua del INTA eran de una continuidad de la sequía donde sólo quedaba excluido el sudeste bonaerense.

Lo que ocurrió en las últimas horas trae alivio y esperanza para todos, porque si algo quedó en claro en la Argentina es que cuando al campo le va mal se sufre en todos los rincones del país.

Las lluvias (que aún hoy se podrían registrar en la franja central del país) renuevan las expectativas en el sector agropecuario y traen algo de calma para quienes intentarán cancelar deudas y recuperar el aliento financiero una vez afrontada la campaña gruesa.

En diálogo con Ámbito, el meteorólogo Mauricio Saldivar aseguró que “los datos indican que estamos en proceso de un fenómeno climático Niño en transición, de moderado a fuerte. Hay un 75% de probabilidad de que sea fuerte este evento y además un 90% de que se mantenga hasta finales del verano”.

Según Saldivar, este fenómeno “comienza en primavera en el noreste de la Argentina y luego durante el verano se extiende al litoral y la mayor parte de la zona núcleo”.

En el agro las necesidades de agua son urgentes, porque existe un marcado déficit hídrico en gran parte de las regiones productivas. El meteorólogo explicó además que "para revertir esta situación necesitamos que en los próximos 15 días caigan sobre la franja central, que va desde la provincia de Formosa hasta el sur de la provincia de Buenos Aires y La Pampa, alrededor de 120 a 150 milímetros.

Sin dudas, la expectativa esta puesta en las lluvias de las últimas horas. En cuanto a este punto, el meteorólogo Leonardo De Benedictis explicó a Ámbito que “puede ser un cambio sustancial de las condiciones hídricas” pero al mismo tiempo advirtió que existe una enorme preocupación por lo que ocurre con las temperaturas, que al descender en exceso dan paso a la aparición de heladas, con el consecuente daño productivo. “Si se genera un frente de lluvias y éstas quedan de manera recurrente, disminuirá el riesgo de heladas porque la humedad va a ayudar mucho a frenar la variabilidad térmica”.

Mirando hacia adelante, el panorama es optimista. Según De Benedictis “el evento El Niño ya está instalado. Hacia noviembre, diciembre y enero se esperan lluvias por encima de lo normal en toda la región pampeana y en gran parte del litoral”.

Este punto también lo destacó Saldivar, al indicar que en las regiones ribereñas del litoral se pueden generar problemas en la zona de islas y en todos los terrenos situados a la vera de los cursos de agua ya que “a partir del mes de diciembre ya van a tener que empezar a sacar el ganado porque los ríos Paraná y Uruguay comenzaran a ver incrementado su caudal durante el verano hasta llegar al pico de crecida que será en marzo”.