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¿Cómo andan las cuentas financieras del Central con todos los dólares que tiene que comprar? ¿Se viene un déficit cuasi fiscal explosivo, como en la época de Alfonsín? Mucha gente pregunta por este ángulo de la política económica y algunos creen que es el talón de Aquiles de este gobierno. Las cuentas no indican para nada esa tendencia: en 2006 los ingresos financieros del Central (por intereses sobre reservas, crédito neto a entidades, intereses sobre títulos públicos, letra intransferible 2016, intereses sobre préstamo garantizado y otros) llegaron a $ 5.289 millones en tanto el pago de intereses sobre diversos títulos del BCRA llegó a $ 4.527 millones, con lo cual se registró un superávit financiero de $ 762 millones. Para 2007, los ingresos financieros, según los rubros descriptos, crecerán a $ 7.240 millones, principalmente por mayores intereses sobre reservas colocadas en el exterior. En tanto, los egresos financieros los estimamos en $ 6.357 millones, con lo cual seguirá habiendo un superávit financiero del Banco Central, aun más alto que el año que pasó, ya que en 2007 alcanzará a $ 882 millones. Si a esto se suma que a partir de enero de 2007 el Banco Nación (entendemos por cuenta del Tesoro nacional) empezó a comprar dólares en el mercado, siguiendo esta política que venimos describiendo, la perspectiva para 2007 es muy sólida. ¿Qué es lo que habría que hacer? Para prepararse para eventuales años de baja recaudación habría que incrementar el grado de compras del Tesoro, para lo cual habría que mejorar el superávit fiscal nacional y con esto compensar la política obsoleta de déficit fiscal que aún tienen las provincias con mandatarios de la vieja ola económica. El riesgo-país, es decir la perspectiva de no cumplir con el pago de las deudas del Tesoro nacional que vencen en el período de pronóstico, no sólo es bajo, sino que es realmente nulo. Este indicador llegó a más de 5.000 puntos antes de la crisis de 2002 y ahora está debajo de los 250 puntos, y sigue bajando.
Faltan bastantes cosas por resolver en la economía argentina; se han creado también problemas innecesarios, pero la política monetaria y fiscal está en el camino correcto y es bueno poder destacarlo mientras siga así.
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