7 de abril 2025 - 12:54

Trabajo en negro, la enfermedad del siglo XXI: ningún gobierno lo frenó, ¿y si la cura es la inteligencia artificial?

Un análisis sobre el mercado laboral argentino, tras décadas de promesas vacías, políticas parches y reformas que no sirvieron para nada. El saldo, una enfermedad crónica: millones de trabajadores en negro y un desempleo que no baja ni con la virgen de Luján. En medio de esa inercia política aparece un actor inesperado, frío, veloz y preciso: la inteligencia artificial. ¿Puede la tecnología hacer lo que la política nunca se animó?

Empleo: la Ia ofrece alternativas y un cambio rotundo en la forma de entender las relaciones lanorales.
Empleo: la Ia ofrece alternativas y un cambio rotundo en la forma de entender las relaciones lanorales.

Por Juan Pablo Chiesa*

Obviamente que la respuesta a la pregunta a la introducción es un sí, rotundo, pero otra pregunta le hago al lector: ¿cómo? Hay palabras que duelen más que un golpe, y números que gritan, aunque no tengan voz. La Argentina enfrenta desde hace décadas dos problemáticas laborales persistentes: el desempleo y el trabajo en negro.

A pesar de innumerables políticas y esfuerzos, estos desafíos continúan afectando a millones de trabajadores. Sin embargo, en el horizonte tecnológico surge una herramienta que promete transformar esta realidad: la Inteligencia Artificial (IA).

En la Argentina, el drama del desempleo y la precariedad laboral se ha convertido en una cicatriz que recorre generaciones. No se trata sólo de estadísticas: son padres que no llegan a fin de mes, jóvenes que sienten que el futuro les cerró la puerta, trabajadores que viven en la cuerda floja del monotributo. Esta nota no es sólo una denuncia: es una invitación a repensar el trabajo, a entender que en la era de la inteligencia artificial, o creamos futuro... o nos deja afuera.

La informalidad ya roza el 45% en el empleo urbano. Es decir, casi la mitad de los trabajadores no tiene derechos laborales, no aporta a la seguridad social y queda fuera del sistema previsional. Y, aun así, el gobierno insiste en que el problema es el gasto público, no la exclusión laboral.

Según datos del INDEC, la tasa de desocupación alcanzó el 6,4% al cierre de 2024, un incremento respecto al año anterior. Esto equivale a más de 300.000 personas sin empleo. Según mis investigaciones, de los últimos 10 años, el dato es falso. La Desocupación estamos cerca de los 8 puntos y personas sin empleo, más de un millón de personas no tiene y no consigue empleo.

Pero lo más alarmante es la precariedad, el mercado negro laboral, más del 50% de la población activa está sub ocupada o en condiciones laborales inestables.

Inteligencia artificial: el impacto en el mundo del trabajo

La Población Económicamente Activa (PEA) de Argentina comprende a todas las personas que, teniendo 14 años o más, están trabajando o buscan activamente empleo.

Cuáles son sus indicadores:

  • Dependientes privados. Sector rural y casas particulares: 7.000.000;
  • Monotributo: 4.000.000;
  • Autónomos: 350.000;
  • Dependientes en negro: 10.000.000

Si sumamos a los dependientes públicos, tememos la PEA, la población económicamente activa, argentinos que tiene por lo menos un ingreso. Pero fíjense que, la mitad de la población activa está en el mercado negro.

Los jóvenes son los más golpeados. Entre los 14 y 29 años, el desempleo trepa al 13,1%, triplicando el índice de los adultos. Este escenario revela un mercado laboral que excluye a quienes más energía y formación tienen para ofrecer.

Tradicionalmente, las soluciones propuestas han girado en torno a reformas legislativas, incentivos fiscales y programas de empleo. No obstante, la irrupción de la IA ofrece una perspectiva innovadora. Esta tecnología tiene el potencial de:

  • Automatizar procesos de contratación: reduciendo tiempos y sesgos en la selección de personal.;
  • Capacitación personalizada: mediante plataformas que adaptan el aprendizaje a las necesidades y habilidades de cada individuo, facilitando la reinserción laboral.;
  • Formalización del trabajo independiente: aplicaciones basadas en IA pueden simplificar trámites y ofrecer asesoramiento para que trabajadores informales transiten hacia la formalidad. De manera independiente, por algo tenemos el surgimiento de la gran renuncia, que va de la mano de la formación independiente.

El país necesita políticas con visión de futuro, capaces de crear empleo genuino y de calidad, dejando de asfixiar a las únicas, 300 mil personas que generan empleo en el país. Si las seguimos estrangulando, el empleo privado va a seguir como esta, hace 20 años

Allí es donde entra la Inteligencia Artificial. Lejos de ser enemiga del trabajo, puede convertirse en aliada estratégica: plataformas inteligentes de empleo, sistemas de monitoreo de condiciones laborales, análisis predictivo de demanda de habilidades, entre otros.

La IA puede identificar sectores emergentes, orientar la formación profesional, y garantizar una intermediación laboral más justa y eficiente. Pero para eso, hay que pensar en grande, regular con inteligencia y apostar por un modelo inclusivo y ético.

La IA generativa tiene el potencial de transformar significativamente el mercado laboral argentino, aunque su impacto real dependerá de la velocidad y el alcance de su adopción, así como de las políticas públicas de empleo implementadas.

La alta exposición de los empleos más calificados sugiere un cambio en el tipo de tareas y habilidades que serán valoradas en el futuro. Si bien la IA puede automatizar tareas intelectuales rutinarias, también puede potenciar la productividad de estos profesionales al permitirles enfocarse en aspectos más estratégicos y creativos de su trabajo.

En definitiva, planteo que la incorporación de la IA es inevitable y potencialmente beneficiosa para la productividad, pero requiere una gestión activa por parte del Estado y los actores sociales para garantizar que sus beneficios se distribuyan de manera equitativa y que los trabajadores (empleadores, empleados e independientes) estén preparados para los cambios en el mundo del trabajo y se capaciten.

El mundo sigue girando, y los humanos nos tenemos que saber adaptar al futuro, de verdad.

* Es abogado especialista en trabajo y empleo, máster en gestión de la IA aplicada al empleo.

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