Apoyo de izquierda que castiga a Lula

Néstor Kirchner

Organizaciones brasileñas de derechos humanos elogiaron a Néstor Kirchner y criticaron a Lula por la revisión de la represión ilegal. Los familiares de desaparecidos en el vecino país salieron a hacer declaración justo cuando se desarrollan en Xiamboiá, en el estado amazónico de Tocantins, tareas para localizar cuerpos de guerrilleros muertos por militares en los '70. De la búsqueda toma parte el Equipo de Antropología Forense, de la Argentina.

«¡Viva Argentina! Las actitudes de Kirchner han hecho diferencia en el sentido del rescate de la justicia. Lula, hasta aquí, sólo agradó a los militares», denunció Suzana Lisboa, de la Comisión de Desaparecidos Políticos de Brasil.

Lisboa criticó la decisión de Lula Da Silva de no abrir los archivos de las fuerzas armadas que, según dijo, «podrían ayudar a castigar a los responsables por los crímenes de la dictadura militar».

• Contradicción

Lisboa señaló que «la falta de una acción decidida en favor de los derechos humanos contradice la prédica del Partido de los Trabajadores y el hecho de que varios de los actuales funcionarios lucharon contra la dictadura».

El secretario nacional de Derechos Humanos, Nilmario Miranda, afirmó que «Brasil viene pacificando esta cuestión hace 25 años. Los hechos aquí no tuvieron la misma dramaticidad que tuvieron en la Argentina. Allá existen muchas heridas abiertas.

El número de desaparecidos y muertos de ellos es mucho mayor». La comisión de búsqueda de restos en Amazonas ha centrado sus trabajos en un cementerio clandestino que, según versiones de otros militares retirados, existiría en el terreno donde en la época funcionó una base militar desde donde se coordinó la campaña contra la guerrilla.

De los cerca de 60 guerrilleros que, se cree, fueron abatidos por el ejército en la zona sólo se recuperaron, hace algún tiempo, los restos de una mujer identificada como María Lucía Petit, mientras que otros despojos que, se estima, son del guerrillero-Joao Carlos Hass Sobrinho están en análisis en Buenos Aires.

En declaraciones al diario «Folha de Sao Paulo», el teniente coronel Licio Ribeiro Maciel afirmó que cuerpos de guerrilleros abatidos fueron retirados del lugar donde estaban enterrados para evitar «las peregrinaciones de la gente».

Maciel, quien participó de la represión a un foco guerrillero instalado en el sur del estado de Pará y el norte de Tocantins, reiteró que no sabía adónde habían sido llevados esos restos. Otro militar, el coronel Pedro Correa Cabral, aseguró, por su parte, que los cuerpos de «cerca de 40 miembros de la guerrilla fueron quemados por las fuerzas armadas».

Una comisión creada por el gobierno brasileño comenzó a buscar el pasado viernes en la remota localidad de Xambioá, estado de Tocantins, los restos de unos 60 guerrilleros comunistas que al parecer fueron abatidos por el ejército entre 1972 y 1975, sin que hasta ahora se hayan encontrado más que unos casquillos de bala.