El empresario farmacéutico Gabriel Brito -quien se encuentra detenido desde el miércoles pasado en la causa que se sigue por la "mafia de los medicamentos"-está declarando en los Tribunales Federales ante el juez Norberto Oyarbide.
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El defensor del empresario Gabriel Alejandro Brito negó que su cliente haya extorsionado a involucrados en la causa sobre la denominada "Mafia de los medicamentos" y rechazó los trascendidos que lo mencionan como uno de los principales aportantes de la campaña presidencial del kirchnerismo para las elecciones de 2007.
Brito "tiene mucho para hablar sobre la mafia de los medicamentos, pero no como imputado, sino como testigo", afirmó el letrado, quien recordó que hace un mes su defendido presentó una querella contra varios de los procesados por Oyarbide, entre ellos el sindicalista Juan José Zanola y Néstor Lorenzo, dueño de una droguería.
Según expuso en su querella y como, de acuerdo a Kalbermatten, lo repetirá ante Oyarbide, Brito entregó cheques a Lorenzo, pero lo hizo para ayudar al dueño de la droguería "San Javier".
Lorenzo, junto a Zanola, la mujer de éste, Paula Aballay, la ex empleada del Policlínico Bancario, Susana Fiona y Carlos Torres, socio del primero, cumplen prisión preventiva por jefes, organizadores o miembros de la asociación ilícita dedicada a la comercialización de medicamentos adulterados o gratuitos. Brito fue detenido el miércoles junto a Walter Maffini, su secretaria Lidia Beatriz Sinicol y Sergio Amarilla, quienes ya fueron indagados pero se negaron a declarar ante Oyarbide y el secretario Carlos Leiva.
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