7 de junio 2007 - 00:00

Boca goleó al Cúcuta y jugará la final con el Gremio

La Bombonera quedó cubierta por la intensa niebla que azota a la Ciudad
La Bombonera quedó cubierta por la intensa niebla que azota a la Ciudad
Boca Juniors se clasificó esta noche para la final de la Copa Libertadores, en la que enfrentará a Gremio, de Brasil, tras superar por 3 a 0 a Cúcuta Deportivo, de Colombia, en una Bombonera oscurecida por la niebla, pero que contó con un equipo local iluminado para hacer historia.

Y al final el equipo auriazul marcó hasta un gol más de los que necesitaba para neutralizar el 1-3 sufrido en el cotejo de ida en Colombia, merced a la inspiración de Juan Román Riquelme y el juego aéreo de Martín Palermo y Sebastián Battaglia, a la sazón los autores de los tres tantos boquenses.

Boca salió dispuesto a llevarse por delante a Cúcuta desde el arranque, alentado por su ruidosa parcialidad y sin importarle la niebla que bajaba y subía con la misma intermitencia que el voltaje ofensivo de los dirigidos por Miguel Angel Russo.

Porque de arranque nomás Juan Román Riquelme y Rodrigo Palacio dispusieron de dos chances inmejorables en el borde del área chica, mano a mano con el ex Independiente y Belgrano, Robinson Zapata, pero en ambas respondió muy bien el arquero.

Todo hacía presagiar por entonces, cuando no habían transcurrido ni diez minutos, que los boquenses podrían alcanzar el objetivo rápidamente, porque los colombianos no hacían pie en ningún sector de la cancha.

Pero cuando promediando ese primer tiempo los locales aflojaron un poco la presión, Cúcuta se animó tímidamente a merodear el área 'xeneize', y en uno de esos intentos a punto estuvo de abrir el marcador.

Un preciso tiro libre lanzado por el lateral derecho Rubén Bustos, autor del tercer gol de Cúcuta en Colombia, rebotó en el travesaño de un impávido Mauricio Caranta, que no intentó defensa alguna.

Sin embargo éste fue un aviso sin demasiado efecto, ya que no tendrían los visitantes más opciones como esa, ni menos peligrosas tampoco, en lo que restaba de esa etapa inicial.

Por el contrario, los dueños de casa retomaron el dominio después de la media hora y no lo abandonarían hasta la finalización del primer período, teniendo como justo premio sobre el final la primera conquista de la noche.

Un tiro libre de Riquelme desde posición frontal se clavó contra el palo izquierdo de Zapata, siendo la primera conquista que por esa vía consique el ex Villarreal desde su retorno a Boca.

Con este estímulo salió a jugar Boca el segundo período, ejerciendo una superioridad que lo ponía muy por encima de este equipo colombiano que no pareció estar nunca a la altura de una semifinal, y mucho menos jugando en una cancha como la de la Bombonera.

A los ocho minutos el partido se interrumpió durante seis a raíz de un banco de niebla que le quitaba la visión a los árbitros asistentes.

De hecho uno de ellos le había anulado a Neri Cardozo un gol en el minuto previo a la suspensión, aunque la decisión en este caso fue correcta.

Pero apenas se reanudó el juego Boca llegó a la segunda e imprescindible conquista mediante un cabezazo de Martín Palermo que entró libre por el segundo palo.

Pero los 'xeneizes' no se conformaron con esa diferencia a la que no le sobraba nada, sino que insistieron en pos de aumentarla para terminar tranquilos el partido.

Y de hecho los locales dispusieron de varias chances más como para aumentar la ventaja, ya sea por una chilena de Palermo que salvó excelentemente Zapata y una posterior entrada de Pablo Ledesma que el arquero obturó abajo, como por algún zapatazo de Hugo Ibarra que también salvó el moreno guardavallas.

Pero apenas superada la media hora Boca empezó a sentir el esfuerzo realizado, se lesionó Claudio Morel Rodríguez y la defensa de Boca pasó un par de minutos de zozobra.

Entonces Russo dispuso el ingreso de Sebastián Battaglia para tratar de equilibrar el medio campo y hacerse fuerte defensivamente en esa zona de la cancha.

Pero la movida del técnico le dio un resultado impensado, ya que apenas ingresado y en la segunda pelota que tocaba, Battaglia conectó de cabeza un corner lanzado por Riquelme y selló la clasificación boquense.

Ahora vendrá el Gremio del arquero argentino Sebastián Saja y su compatriota, el múltiple campeón con Boca, Rolando Schiavi.

La primera final en la Bombonera y la segunda en Porto Alegre.

Pero por hoy, las bengalas de los hinchas pudieron más que la niebla.

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