Los bonos argentinos son un «boom». En seis días de diciembre están dando ganancias de medio por ciento diario. Mientras, los cupones PBI duplican esa renta ya que han subido 6%, un punto diario. En otras palabras, se está ganando en un día lo que el plazo fijo rinde en un mes.
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Para participar de esta bonanza se requiere un mínimo de $ 1.000 y abrir la cuenta en un banco o en una casa de inversión. Allí se pueden suscribir los fondos de renta fija, que tiene en su menú toda la variedad de bonos argentinos. Los principales fondos de inversión del mercado para los pequeños y medianos ahorristas son FIMA (Banco Galicia), FBA (BBVA Banco Francés), Superfondo (Banco Río), Pellegrini (Banco Nación), Toronto Trust, Arpenta y Provincia. Con una cuenta corriente o caja de ahorro, el ahorrista suscribe una cuota parte de los fondos y está defendiendo su dinero de la inflación porque los bonos ajustan por ese índice.
Hay que tener en cuenta que para ahorrar en bonos es necesario disponer de paciencia porque estos títulos tienen ciclos de suba y baja. Pero como la inflación es permanente, son una buena cobertura y, si el inversor tiene tiempo para no tocar su dinero, las chances de ganar aumentan.
Si el ahorrista tiene algo más de experiencia en el mercado financiero y dispone de entre $ 3 mil y $ 5 mil como mínimo, puede operar a través de un agente de Bolsa. Pero aquí, es el inversor el que debe decidir qué bono comprar. En un fondo de inversión hay expertos que seleccionan la cartera. distintos.
El Discount en pesos, que paga intereses a fin de año, hoy es el título preferido por los inversores. Es volátil porque es de largo plazo, pero no ha dejado de subir desde fines de octubre.
Si la suma es superior a los $ 3.000, la cartera completarse con BOGAR 2018 de mediano plazo y algún BOCON PRE8, PRE9 o PRO 12.
Y si busca aprovechar el momento al máximo y dispone de una presión arterial que no sube fácilmente, puede incorporar un porcentaje de Cupones PBI, preferentemente en dólares, al menú.
Pero atención, no es necesario armar una cartera volátil para ganar. El inversor debe tener también, bonos cortos, medianos y largos. La proporción de cada uno es lo que da el grado de riesgo de la cartera. Aquí van unos datos para conocer mejor el mercado de bonos:
Nobac: Son Notas del Banco Central que ajustan por Badlar que es la tasa de interés que pagan los bancos por plazos fijos a 30 días de más de un millón de pesos. Las Nobac dan esa tasa variable más una sobretasa de entre 1 y dos puntos de acuerdo al plazo. La renta se estima en 11% anual, pero como la Badlar que se paga es la del día del vencimiento del bonos, esa tasa puede ser más alta. La Badlar hoy está en 9,75% anual, a lo que hay que sumarle una sobretasa de 2,5% anual en la Nobac.
Lebac: son Letras del Banco Central que emite Martín Redrado, se licitan todos los martes. Pagan una tasa fija. Tanto las LEBAC como las Nobac son de liquidez inmediata, es decir se pueden vender en cualquier momento y se reconocen los intereses acumulados. Rinden alrededor de 10% mensual.
Fideicomiso: Son préstamos que se hacen a empresas contra garantía de algún bien fácilmente realizable. Por ejemplo, a comercios con garantía de los cupones de tarjeta de crédito con las ventas a plazo. Si es para construir un inmueble, esa propiedad es la garantía para los que ponen plata. Dan una renta de alrededor de más de 13% anual.
Bonos del canje de la deuda: Son bonos de muy largo plazo que se emitieron cuando Roberto Lavagna cerró el canje de la deuda con una quita de alrededor de 70%. Los principales bonos son el Discount y el Par en pesos o dólares.
Cupones PBI: vienen con los bonos del canje, pero se pueden negociar por separado. Subieron más de 130% en el año y están nominados en pesos y en dólares. El 14 pagan su primer servicio de renta.
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