2 de agosto 2007 - 00:00

Faltaría trigo a fin de año. ¿Se importará desde EE.UU.?

Faltaría trigo a fin de año. ¿Se importará desde EE.UU.?
El trigo volverá a complicar al gobierno durante los próximos tres meses por el cierre de las exportaciones que termina afectando los precios. Aunque se especula que el próximo sábado -durante la inauguración oficial de Palermo- se anuncie la liberación parcial de los registros de exportación, el impacto ya se hace efectivo en el mercado: una tonelada de cereal de la cosecha 2006/2007 cotiza hoy u$s 155 para setiembre contra u$s 168 del trigo de la nueva cosecha 2007/2008.

Esto implica una diferencia a favor del trigo nuevo de 8,4%, cuando históricamente la campaña que aún no comenzó a cosecharse solía cotizar más bajo que lo disponible.

En la Argentina aún quedan en poder de los productores 500.000 toneladas de trigo «viejo», que permitiría a los productores obtener una utilidad anual en dólares de 25% si se mantiene la diferencia de precios a favor del grano que se comenzará a cosechar a partir de diciembre.

Si el agricultor retiene el trigo en su poder, lo guarda en los silos, aun con el costo operativo de éstos, y lo vende ya con precio futuro a enero de 2008, puede lograr esa diferencia importante.

«Con el precio que tiene hoy el trigo que recolectaré en enero no lo vendo ni loco...», repetía ayer en la Exposición Rural de Palermo un agricultor de Tres Arroyos.

Analistas del mercado indicaban que la especulación de los productores es lógica aunque va a generar escasez de trigo en los próximos meses. Un informe privado que circulaba ayer por el mercado indicaba que el panorama se pondrá complicado para el gobierno durante noviembre, en su afán de mantener acotado el precio del pan.

Aunque el gobierno abra el registro de exportaciones de trigo, las empresas se verían complicadas para conseguir el cereal. El freno impuesto al comercio exterior de dicho grano se sumó a las cuestiones climáticas adversas y a las trabas energéticas que recortaron la producción de fertilizantes. Todo esto afectaría los rendimientos de la próxima cosecha. En consecuencia, el Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA) previó una cosecha de 12,8 millones de toneladas para la campaña próxima contra los 14,2 millones recolectadas en 2006/2007.

  • Recortes

    «No sé si los molinos especulan con un último trimestre sin materia prima, pero algo de eso sucederá. Ya comenzó a hablarse de importaciones de trigo para molienda si no se brinda transparencia al mercado», admitía un operador bonaerense.

    El negocio del cereal no fue bueno este año porque los agricultores debieron aceptar recortes importantes en los precios luego de trámites burocráticos y complicados para acceder a las compensaciones que no son otra cosa que subsidios que deben tramitarse en conjunto con los molinos.
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