Lo que se dice en las mesas

Algo más de alivio hubo ayer en las mesas en un mes negro para las inversiones. Salvó algo el comunicado ayer de la Reserva Federal alejando temores de que Estados Unidos pueda caer en una recesión. Puntualmente, Ben Bernanke habla más del temor a la inflación, lo que hizo revivir mercados o, por lo menos, frenar la ola de ventas existente. Como siempre, contar con información antes que otros permite generar ganancias a operadores. En ese sentido, hubo quienes, para anticipar la evolución de una eventual crisis en el mercado de hipotecas seguían de cerca la acción en Wall Street de Bear Stearns, el banco de inversión que tenía fondos específicamente afectados a ese negocio y que entraron en serias dificultades. Así, viendo la evolución de este papel esta semana, se podía anticipar el impacto en los países emergentes.   

¿Vendió bonos de la Argentina Hugo Chávez o no? Los jefes de mesa de grandes bancos de inversión -los que prácticamente concentran el núcleo del volumen- aseguran que no hubo ventas desde Caracas y que, si las hubo, no afectaron a las cotizaciones. Quizá la duda puede quedar, porque la Argentina y Ecuador esta semana operaron en sintonía y contra la tendencia del resto de los emergentes (de estos países un fondo venezolano tiene papeles). Más allá de esto, ayer hubo una ligera recuperación, pero lejos de la euforia. Interesante comparación efectuó un operador que siempre opta por el anonimato: el Discount en pesos rinde 6,4% anual más la inflación (estimado en 8% tras intervención del INDEC). Uruguay hace una semana colocó un bono en pesos a 30 años que paga 3,70% anual más la inflación (en el país vecino no se la manipula y es de 8% anual). Además, se suma que el peso argentino tiene margen para apreciarse, mientras que la moneda de Uruguay no tanto, ya que casi está en equilibrio su cuenta corriente. ¿Se justifica así tamaña diferencia de rendimientos? Por eso surgen quienes ya buscan «hincar el diente» a estos papeles indexados argentinos.

Una nutrida delegación de ejecutivos de fondos de inversión trajo el UBS (Unión de Bancos Suizos) a Buenos Aires. Desfilaron en el salón del NH City importantes economistas locales que dieron su visión de lo que puede suceder con la economía local. Claramente, no hay entusiasmo con la Argentina entre inversores, más cuando entran a analizar las medidas que se están tomando en materia energética. Lo del INDEC lo ven como una segunda «violación» (la primera, el default de 2001), y precisamente ahora las miradas están puestas en el próximo martes, cuando se dará a conocer la inflación minorista de junio. ¿Cuánto será? Trascendió que quienes esperan un sinceramiento de los precios este mes sufrirán otro duro golpe. El alza real, por alimentos una vez más, fue de 1%. Pero el INDEC informará que el aumento de precios ascendió a 0,5% o, en el mejor de los casos, a 0,6%. Esto, además, por una orden celestial de que el semestre tiene que cerrar con incremento acumulado de 4% como máximo.   

Hasta Nigeria atrae inversores entre emergentes. Un informe del JP Morgan que llevó clientes durante una semana a Abuja y Lagos. Tuvieron una primera impresión favorable por una mayor supervisión a los bancos nigerianos. Hasta destacan que la estructura del sistema financiero es similar a la de Brasil en los 90, más que nada por la escala de oportunidades hacia adelante. ¿Momento de comprar papeles de bancos nigerianos? Se necesitan agallas, pero, sin ellas, no se accede a ganancias siderales nunca. Habrá que ver. Otro emergente afectado por la inflación, pero que no cuenta con Guillermo Moreno como «policy maker» ( hacedor de políticas), es Sudáfrica. Se informó ayer que el índice mayorista trepó 1,1% y acumulado en doce meses es de 11,3%, el nivel más elevado desde 2002. ¿Qué van a hacer? Simplemente, subir la tasa de interés. Perú, una estrella entre emergentes, atrajo más: su Congreso aprobó el libre comercio con EE.UU. y hay una rendija abierta para que lo hagan los legisladores norteamericanos antes del receso de agosto.