13 de febrero 2007 - 00:00

Oscilantes los títulos

No son buenos momentos para el ahorrista en títulos y acciones. Es que la incertidumbre que genera la intervención oficial en el INDEC se mantiene. El gran interrogante hoy entre inversores pasa por el nivel al que llegará la manipulación del dato de inflación por parte del secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno. ¿Qué está ya descontado? Que en lugar de ser de 10% este año el alza de precios minoristas, será de 8,5% o de 9%. Ahora bien: si llegara a ser mayor esa alteración, los precios de los títulos argentinos caerán aun más. Dependerá en buena medida de lo que suceda este mes. Por eso es que ayer, tras una apertura con clara tendencia a la baja, al cierre se recuperaron los precios.

Oscilantes los títulos
Los bonos terminaron el día con bajas generalizadas, pero leves, lo que indica que si no tocaron fondo, al menos podrían estar cerca de hacerlo.

La reacción de los precios en la hora final de la rueda hace pensar que hoy puede haber una recuperación. El problema es que el mercado quedó tan herido, que cuando los bonos comienzan a subir aparecen vendedores que impiden afianzar el alza.

Cada nueva noticia sobre el INDEC altera el ánimo de inversores cargados de dudas. Este diario anticipó ayer que habría «correcciones» al dato de inflación de este mes. Además, cuando después del mediodía trascendió que hubo comercios que rechazaron a los encuestadores del INDEC por temor a ser perseguidos por la Secretaría de Comercio, se frenó un rebote de los precios.

No hay argumento en el mercado que pueda amortiguar el impacto que tuvo en la fe de los inversores lo que sucedió en el organismo. Aunque la calculadora indique que por más que retoquen algunos datos, la inflación seguirá alta y la rentabilidad de los bonos muy atractiva, porque el dólar seguirá tranquilo, el inversor quedó resentido y por eso los bonos ayer cayeron 0,20% en promedio y llevan perdido más de 5% en las últimas siete ruedas. ¿Quién les garantiza a los inversores en bonos argentinos que en el futuro no se vulnere cualquier otra condición de emisión de los bonos, incluido el cupón de intereses?

Hasta los peores bonos de la región ayer subieron. El anuncio de que Ecuador se tomaría los 30 días de gracia que tienen para pagar el cupón de intereses del Global 2030 que vence el jueves cayó bien en el mercado y los títulos subieron más de 3%. Nuevamente, los bonos argentinos fueron los únicos en Sudamérica que bajaron.

Fue una apuesta extraña la del gobierno, porque con la intervención en el INDEC, los bonos de la deuda perdieron confianza, se le encareció el costo de endeudarse en dólares, aumentó el riesgo-país y cayó el magro nivel de seguridad jurídica que había, a cambio de nada, porque una cifra que no es creíble pierde la categoría de índice o referencia.

A todo esto, los negocios en bonos fueron menos que lo habitual, como sucede cada lunes. Entre el Mercado Abierto Electrónico (MAE) y la Bolsa de Comercio operaron poco más de $ 1.500 millones en bonos. Se notó la ausencia de inversores del exterior y lo poco que se operó en dólares fueron órdenes de venta.

Sólo un bono sobrevivió a las caídas y fue el BOCON PRE8, que subió 0,23%, porque es un título corto en el que se refugiaron algunos vendedores de bonos largos.

La renta de los bonos del Tesoro de Estados Unidos no ayudó esta vez, porque subió a 4,81%. El mercado teme que el discurso semianual que dará mañana Ben Bernanke, el titular de la Reserva Federal, en el Congreso de Estados Unidos sea pesimista al hablar de la inflación.

La buena noticia que tienen los tenedores de bonos para hoy es que el dólar puede bajar, porque quedó muy vendedor. En el MAEForex, el principal mercado mayorista, para hoy piden $ 3,102 para la compra y $ 3,104 para la venta. Las órdenes de venta para hoy suman u$s 100 millones y hay compradores por tan sólo u$s 10 millones.

El dólar ayer abrió sostenido, pero a partir de las 11.45, cuando tocó el máximo de $ 3,107, aparecieron órdenes grandes de venta y el dólar no dejó de bajar hasta el cierre, cuando terminó a $ 3,105.

El Central hizo algunas compras, alrededor de u$s 20 millones, y elevó las reservas a u$s 31.038 millones.

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