El escritor mexicano José Emilio Pacheco recibió el Premio Cervantes 2009, máxima distinción de las letras hispanas, y destacó su descubrimiento de esa otra "realidad llamada ficción" al leer "Don Quijote de La Mancha", cuya gloria puede dar respuestas "en medio de la catástrofe".
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Pacheco fue distinguido en la ciudad de Alcalá de Henares, a 30 kilómetros de Madrid, donde confesó además que se hundió en una "irrealidad quijotesca" cuando supo que era el ganador del galardón, dotado de 125.000 euros.
"Todo cambia día a día, todo se corrompe, todo se destruye. Sin embargo, en medio de la catástrofe, al centro del horror que nos cerca por todas partes, siguen en pie, y hoy como nunca son capaces de darnos respuestas, el misterio y la gloria del Quijote", declaró Pacheco, en su discurso muy breve que escribió para la ocasión.
El poeta y novelista, de 70 años, recibió la medalla y la escultura por el Premio Cervantes de manos del rey de España, Juan Carlos, en una ceremonia a la que asistieron además la reina Sofía, el presidente del gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, y la ministra de Cultura, Angeles González-Sinde.
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