30 de abril 2020 - 19:27

Concluyó "Homeland", una de las mejores de todos los tiempos 

Luego de nueve años de seguir las misiones, obsesiones y errores de la agente Carrie Mathison, "Homeland" cerró con una brillante octava temporada. La serie estuvo siempre un paso adelante de los conflictos geopolíticos y bélicos.

La actriz Claire Danes como Carrie Mathison.

La actriz Claire Danes como Carrie Mathison.

Imágenes de la serie

Luego de nueve años de seguir las misiones, obsesiones y errores de la agente Carrie Mathison, “Homeland” cerró definitivamente con una brillante octava temporada. Lo visto estuvo a la altura de lo que la multipremiada y maravillosa Claire Danes tenía acostumbrados a sus seguidores, a quienes sin duda costará verla en otro personaje que no sea el de la bipolar espía norteamericana.

El último capítulo arrancó con la imagen del soldado Nicholas Brody (Damian Lewis) quien había sido asesinado en el final de la tercera temporada, generando la ira y desazón en los televidentes. Cuando arrancó la cuarta temporada se dudaba de que la serie adaptada por Alex Gansa (basada en la israelí “Hatufim”, de Guideon Raff) pudiera recuperar algo del espíritu que se perdía con la muerte de Brody. No obstante, los guionistas demostraron que era posible volver a tejer tramas atrapantes vinculadas con las guerras actuales y el protagonismo que cobró Mandy Patinkin como Saul Berenson resultó el mayor acierto.

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Finalizó la octava temporada de "Homeland".

Finalizó la octava temporada de "Homeland".

“Homeland” estuvo siempre un paso adelante de los conflictos geopolíticos y bélicos, acaso como una atemorizante premonición que jamás subestimó al televidente: se abordaron en mayor o menor medida las guerras de los últimos 20 años entre Estados Unidos y el mundo: desde Irak, la muerte de Saddam Hussein, armas de destrucción masiva, las torres gemelas, Afganistán en la era Bush, el programa de drones norteamericano , guerras químicas con gas sarín y en la última volvió Rusia como enemigo eterno, sumando a Pakistán como tierra donde se asilan líderes terroristas. Esta temporada no temió mostrar la muerte de los presidentes norteamericano y pakistaní (en otras temporadas murieron, asesinaron o derrocaron a otros tantos) y exhibió el ascenso de un inexperto e ignorante vicepresidente.

En cuanto a la intimidad y transformación del personaje de Carrie, el disparador de esta temporada la muestra durante su rehabilitación luego de haber estado presa en Rusia y privada de su medicación, lo que alimentó sospechas de que pudiera no estar en su sano juicio. Sin embargo, Saul (cada vez mejor como el ministro de seguridad norteamericano, eterno protector que derrocha su confianza ciega en Carrie) recurre a su alumna dilecta para encontrar a un líder terrorista en Pakistán, siendo ella, una vez más, la única capaz de conseguirlo. De modo que Carrie vuelve al ruedo y no sólo encuentra al terrorista sino que consigue dar con la caja negra del avión caído con los dos presidentes. Siempre el instinto, inteligencia y agudeza de Carrie terminan venciendo por sobre su fragilidad emocional y su condición. Y la trama se tuerce tanto y tantas veces como para que Rusia tenga injerencia en esta pesquisa y para que la CIA sospeche que Carrie en realidad está colaborando con el enemigo.

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Finalizó la octava temporada de "Homeland".

Finalizó la octava temporada de "Homeland".

Quedaron algunos interrogantes: los recuerdos borrosos de los primeros capítulos que ligan a Carrie con el espía ruso Yevgeny Gromov (Costa Ronin). Ese agente se autoproclama salvador de Carrie cuando estaba presa y conocedor de secretos ocultos, algo que promete intriga pero se diluye, más allá de la confesión de Carrie a cerca de su hija Frannie, a la que no visita. Como ya se señaló, el último capítulo arranca con Nicholas Brody asegurando a cámara que nunca fue traidor y que ama a su país. Recién en el último minuto se comprenderá por qué se lo evocó, además de rendirle un merecido tributo a ese personaje impar. El desenlace brinda una inteligente vuelta de tuerca para que Carrie no deje de ser esa heroína incansable, sin embargo, todo se adivina un poco antes de ese minuto final. La previsibilidad le gana a la sorpresa, algo que se le perdona por lo genial de una serie que está en el podio de las mejores de todos los tiempos.

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