En un incidente sin precedentes, tres alumnos del colegio Madre Teresa de Calcuta en Salta fueron expulsados tras llevar una torta de cumpleaños contaminada con clonazepam, causando la intoxicación de varios de sus compañeros. Este fármaco, conocido por sus efectos ansiolíticos y relajantes musculares, provocó la necesidad de un lavado de estómago urgente para uno de los afectados.
6/07/24 M Insólito: llevaron una torta con clonazepam, intoxicaron a todos sus compañeros y fueron expulsados del colegio
Una inocente celebración de cumpleaños se convirtió en una peligrosa situación de salud pública. Conocé lo sucedido en la escula de Salta.
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Llevaron una torta con clonazepam, intoxicaron a todos sus compañeros y fueron expulsados del colegio
El clonazepam es un medicamento que actúa sobre el sistema nervioso central, utilizado para tratar trastornos de ansiedad y epilepsia debido a su capacidad para reducir la excitación nerviosa. Sin embargo, en dosis no controladas puede tener efectos adversos graves, como los experimentados por los estudiantes afectados en este caso.
Festejó su cumpleaños con una torta con clonazepam
El incidente tuvo lugar durante la celebración del cumpleaños de quince años de una compañera en la escuela, donde los estudiantes compartieron porciones de una torta. Minutos después, varios alumnos comenzaron a mostrar síntomas de intoxicación, como mareos y malestar, lo que alertó rápidamente a las autoridades escolares y médicas.
La gravedad de la situación se reflejó en la necesidad urgente de realizar un lavado de estómago a la cumpleañera y a otros dos estudiantes afectados, medida crucial para mitigar los efectos del fármaco.
Además, el incidente se intensificó cuando se descubrió que la alumna responsable de la torta estuvo desaparecida durante varios días, desencadenando un protocolo de búsqueda coordinado por la policía local. Por otro lado, los padres de los estudiantes afectados presentaron una denuncia formal, marcando el inicio de un proceso legal para responsabilizar a los culpables y prevenir incidentes similares en el futuro.
Ante este suceso el director del colegio, Alejandro Vilte, identificó a los alumnos involucrados tras una exhaustiva investigación interna, reforzando así la transparencia y el compromiso del colegio con la seguridad y el bienestar de sus estudiantes. Como consecuencia directa, ordenó la expulsión de los tres alumnos responsables de llevar una torta contaminada con clonazepam. Vilte declaró que no considera el evento como una simple broma, sino como una grave falta contra la salud de los estudiantes.
Además, reflexionó públicamente sobre la necesidad urgente de una supervisión más estricta por parte de los padres en el manejo de medicamentos en el hogar, subrayando la responsabilidad compartida en la seguridad de los jóvenes dentro y fuera del ambiente escolar.
Este suceso generó un profundo debate en la comunidad educativa sobre la seguridad y la responsabilidad individual de los estudiantes, así como sobre la necesidad de una supervisión más rigurosa en todas las actividades escolares. En respuesta, el colegio implementó controles más estrictos sobre los alimentos servidos en eventos escolares e intensificó los programas educativos para sensibilizar a los estudiantes sobre los riesgos asociados con el manejo indebido de medicamentos.
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