Rubén Bareiro, hijo y hermano de los dos hombres asesinados en una parrilla del barrio porteño de Colegiales en medio de un sangriento asalto, afirmó esta mañana que los jueces que habían liberado a uno de los jóvenes que cometió los homicidios "tienen una gran culpa" por esas dos muertes.
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"Ellos no los mataron a mi viejo y a mi hermano, pero tienen una gran parte de la culpa. Queremos justicia y queremos que paguen los jueces por dejar en libertad a esta persona por una fianza de 400 pesos", dijo el joven, en declaraciones a la prensa formuladas en el velatorio de los restos de su padrastro y su medio hermano.
La referencia de Rubén Bareiro tiene relación con la decisión que había adoptado hace 8 días la Sala VI de la Cámara del Crimen de la Capital Federal, que había liberado a un joven de 19 años, de nacionalidad chilena, uno de los que ahora mató a su padrastro y a su medio hermano en la parrilla "Nacho´s" de Colegiales.
El joven liberado había sido excarcelado a cambio de 400 pesos de fianza, por decisión de los jueces Luis María Bunge Campos y Susana Nocetti de Angeleri, y con la disidencia de Marcelo Lucini, ex juez del caso Cromañón.
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