Una argentina y dos hondureños permanecían ayer detenidos en Bolivia, señalados como los presuntos autores del secuestro de un niño de ascendencia coreana en la ciudad boliviana de Santa Cruz de la Sierra.
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Viviana Moreno (de 34 años), Ruddy Flores (25) y Fernando Gómez (23) fueron trasladados a la cárcel de Palmasola, donde cumplen la detención preventiva ordenada por la jueza María Eugenia Algarañaz.
Moreno, médica y amiga de la familia del menor secuestrado, es señalada de haber planificado el hecho, según afirmó el comandante de la policía de Santa Cruz, Germán Flores.
El niño, de 10 años, nieto del rector de la Universidad Cristiana de Bolivia (Ucebol), fue secuestrado el miércoles pasado al salir de la escuela y permaneció en poder de sus captores durante 48 horas. Fue liberado sin que mediara pago de recompensa, que en principio se fijó en un millón de dólares.
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