Su expareja la golpeó salvajemente y lo denunció por Facebook

Vanesa relató su calvario en Facebook.

Un joven enfermero fue detenido e imputado por la presunta comisión de los delitos de lesiones leves y de amenazas a su novia de 32 años de la ciudad cordobesa de Villa María, quien publicó en su página de Facebook las fotos de los golpes que había recibido.

La fiscal de Instrucción que entiende en el caso, Silvia Maldonado, aseguró esta tarde a la prensa que "esta es la primera denuncia que Vanesa Bertotto formula en contra de Diego Pujol (36 años)".

El joven, que se desempeña como enfermero en una clínica privada, está detenido e imputado por la presunta comisión de los delitos de lesiones leves y de amenazas, en virtud de la denuncia formulada por su exnovia.

Bertotto precisó a la prensa que el hecho sucedió en la madrugada del domingo pasado, cuando Vanesa salió de la casa de comida en la que trabaja, para reunirse "con un grupo de amigas".

La joven, tras aclarar que durante todo el día había recibido "mensajes de texto y llamadas" por parte de Pujol, señaló que la pareja había terminado, luego de que ella notara que "era muy celoso y que desconfiaba de todo".

"Sin decir nada al verme (en la vereda de la casa donde estaba) se abalanzó sobre mí con el puño cerrado. Me tiró un un golpe hacia el rostro, que casi me desfigura. Aun cuando perdía mucha sangre por la nariz, no se detuvo y siguió con su golpiza, hasta el punto que me quebró dos dientes y me provocó raspones en el hombro y en la espalda", relató Bertotto.

La joven contó que sus amigas le insistieron para que fuera "a la comisaría a denunciarlo", para que el hecho no quedara en la nada, y agregó que el domingo habló con sus familiares para difundir lo sucedido "por internet", por lo que publicó fotografías (sobre el estado en el que había quedado) en su cuenta de Facebook.

"Lo hablé con mi familia y ellos me dijeron que contaba con todo el apoyo de ellos. Fue una decisión útil", manifestó la joven, quien dijo que "en algunos momentos tengo miedo de que pueda volver a salir y recuperar la libertad, y que me pase algo peor".

Como consecuencia, Bertotto, que había mantenido con Pujol "una relación de entre tres y cuatro meses", pidió a la Justicia "una especial protección" y acotó: "me tocó a mí ser víctima de esta persona, antes a quién le tocó? Y mañana, ¿a quién le toca?".