Yogur como fuente de proteínas, un alimento esencial en la dieta diaria para el desarrollo muscular

Nuevos formatos, nuevas presentaciones y más aporte de proteína ubican al yogur en un lugar privilegiado para mejorar el bienestar general y mantener la fuerza muscular.

Los probióticos cumplen un rol fundamental en la recuperación luego de realizar actividad física.

Como muchas de las tendencias de consumo “foodie”, hoy se experimenta un nuevo boom y es el asociado a la ingesta diaria de proteínas a través del yogur: ¿cuántos gramos por día son los ideales?, ¿en qué formato se absorbe mejor y cuál es el momento del día para consumirlo? Y como plus: depende la actividad física que se haga, hay un tiempo para consumirla.

La importancia de la proteína radica en el aporte fundamental para la salud ósea y muscular: una masa muscular fuerte previene la osteoporosis, es metabólicamente más activa y en óptimas condiciones no solo favorece el rendimiento deportivo, sino que protege los huesos de lesiones o accidentes.

Se sabe que el ejercicio físico es un aliado en el mantenimiento muscular, pero hay un vínculo directo entre los probióticos y la recuperación de los músculos luego de entrenar: la microbiota puede ayudar a mejorar la digestión de los nutrientes y aprovechar el lactato durante el ejercicio, situación clave en el ejercicio de alta intensidad y recuperación.

Los probióticos cumplen un rol fundamental en la recuperación luego de realizar actividad física. Mejora los marcadores proinflamatorios post ejercicio, algo fundamental para mantener los músculos sanos y protegerlos de lesiones.

“La nutrición deportiva ya no es solo para atletas es para quienes busquen sentirse mejor, y el yogur resulta un excelente aliado por su superioridad en incorporación de nutrientes y sus fermentos que mejoran esa absorción”, asegura Romina Pereiro, Licenciada en Nutrición MN 7722.

Una masa muscular saludable es metabólicamente más activa, ayuda a evitar la pérdida ósea y, en combinación con el ejercicio regular, reduce el riesgo de lesiones. Además, una musculatura bien desarrollada no solo sostiene y mueve el cuerpo, sino que también contribuye al bienestar metabólico al incrementar el gasto calórico en reposo y mejorar el equilibrio energético.

Los yogures proteicos son una tendencia mundial de alimentación, por contener tanto proteínas de absorción rápida como lenta, asegurando un flujo constante de aminoácidos esenciales como histidina, leucina, isoleucina, treonina, valina y glutamina, fundamentales para la reparación muscular. Si bien todos los yogures tienen proteína, recientemente se presentó en el mercado una nueva opción sin azúcares agregados con 15 gramos de proteína de alta calidad con los 9 aminoácidos esenciales que favorecen el crecimiento y mantenimiento de la masa muscular, probióticos que benefician el desarrollo de la microbiota intestinal, vitaminas D y E que marca que esta tendencia llegó para quedarse.

En el universo de alimentos proteicos, las proteínas lácteas son completas debido a que están formadas por dos fracciones: las proteínas del suero o whey protein y las caseínas, ambas son de alto valor biológico, es decir que aportan todos los aminoácidos que el cuerpo necesita. En cambio, las proteínas vegetales, como la proteína de arveja o soja, son incompletas ya que tienen aminoácidos limitantes, es decir que no aportan todos los aminoácidos que el cuerpo necesita. Para obtener proteínas similares a las de origen animal, se requiere combinar las legumbres con cereales, cómo por ejemplo arroz.

La microbiota intestinal también juega un rol crucial en el rendimiento físico y la recuperación muscular:

• Mejora los marcadores proinflamatorios, acelerando la recuperación muscular.
• Contribuye a una digestión más eficiente de nutrientes, favoreciendo la síntesis proteica y el desarrollo muscular.

Además, los probióticos pueden fortalecer el sistema inmune. Según estudios clínicos, tienen la capacidad de estimular el sistema inmunológico a través de complejos mecanismos que aumentan la respuesta inmune, mejorando la eficiencia del cuerpo para enfrentar infecciones respiratorias e intestinales provocadas por virus o bacterias.

Sin embargo, es importante aclarar que no todos los yogures del mercado tienen probióticos. No hay que confundir que sean fermentados (es decir, que tengan microorganismos que ayuden a elaborar el yogur) con que tengan probióticos (que son microorganismos que llegan vivos al intestino), ya que el hecho de que tenga probióticos es lo que ayuda a brindar beneficios para la salud, concluyó Romina Pereiro, Licenciada en Nutrición MN 7722.